Cinco lecciones que los emprendedores deben aprender de los niños


En el camino hacia la etapa adulta, un profesional adquiere formación y nuevas competencias, sin embargo, también pierde habilidades propias de la infancia que son muy útiles en el éxito profesional. Sin duda, los niños tienen grandes lecciones de inteligencia emocional que dar a los adultos. Cualquier día es bueno para desaprender ciertos hábitos y obtener otros nuevos. ¿Qué lecciones puede dar un niño a cualquier emprendedor?

Aprendizaje lúdico

Los niños afrontan los retos con espíritu positivo, sin dejarse limitar tanto por el miedo al fracaso tan propio de los adultos. Además, los niños asocian muchos aprendizajes nuevos con el espíritu lúdico que surge del juego porque no es incompatible aprender y divertirte. Existen adultos que han perdido la capacidad de disfrutar con aquello que hacen cuando en realidad, retomar el contacto con la vocación profesional es un primer paso hacia el éxito.

Tienen una curiosidad natural

Los niños tienen una curiosidad natural por comprender mejor la realidad. Cuando no saben algo preguntan con total naturalidad con el objetivo de conocer la respuesta. Esta curiosidad natural es importante cultivarla también en la etapa adulta con el objetivo de apostar por la formación constante que muestra que no existe un límite en el conocimiento.

Fruto de esta curiosidad natural, los niños también son muy despiertos y observadores, ponen una atención especial en el medio que les rodea. La observación es otra cualidad que cualquier emprendedor debe de poner en práctica para poder tomar ideas de los demás.

Facilidad para hacer nuevas relaciones sociales

El networking es muy importante para cualquier profesional que establece contactos de trabajo con los que poder mantener un feedback frecuente. Las habilidades sociales son inherentes al ser humano y comienzan a practicarse en la infancia como muestra la naturalidad con la que cualquier niño hace amigos nuevos. Existen habilidades que son especialmente importantes para hacer contactos como emprendedor: la naturalidad de ser tú mismo y la espontaneidad.

Además, los niños también pasan página con más facilidad después de un conflicto personal que los adultos que pueden quedar estancados durante días o semanas en problemas de comunicación laboral. El arte de simplificar las cosas es una buena técnica para cualquier emprendedor.

Viven el presente

Los niños viven su realidad a partir del momento presente sin qudar enredados constantemente en ansiedades de futuro o en preocupaciones del pasado. La capacidad de concentrar la atención y la energía en el momento presente es una premisa básica para optimizar el talento y encauzarlo en una dirección adecuada. Al poner la atención en el presente se reducen miedos tan humanos como el temor al fracaso.

Los emprendedores pierden grandes ideas al perder una energía tan valiosa puesto que las emociones desagradables como el estrés y la ansiedad son agotadoras y producen un gran desgaste. Por otra parte, desde la perspectiva del carpe diem propia de los niños, la realiad fluye con más naturalidad, los obstáculos se convierten en oportunidades y los errores en un motivo para volver a intentarlo de nuevo.

Pensamiento positivo

Los niños tienen muchos pensamientos positivos en su mente a lo largo del día. Estos pensamientos positivos elevan la motivación, potencian la creatividad y mejoran el estado de ánimo. Por eso, cualquier emprendedor también debe de cultivar su carácter con pensamientos positivos con el objetivo de integrar la inteligencia emocional en el proceso de construcción de un negocio cuyo éxito depende de la suma de muchos factores: aprendizaje lúdico, tener curiosidad natural, hacer nuevas relaciones, vivir el presente y el pensamiento positivo son cinco lecciones sencillas pero valiosas que todo niño puede dar a un emprendedor adulto.

1 comentarios

  1. Así es Maite, la infancia, además de ser una etapa vital preciosa, es cuando, generalmente, se ponen las bases para una etapa adulta verdaderamente positiva y rica. Esto no se da en todos los casos, hay personas que sufren una infancia desgraciada y que necesitan aprender y reorientar su vida con esfuerzo y con capacidad para perdonar y dejar lo malo atrás … Cosa posible, siempre es buen momento para empezar a ser feliz tras una etapa mala, sea del tipo que sea, y mirar hacia adelante con espíritu positivo.

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