La eficacia de las reuniones de trabajo


Las reuniones de trabajo deben tener un sentido y un fundamento, es decir, deben tener un tema a tratar. Pero además, es muy importante que quede fijada no sólo la hora de inicio de una reunión sino también, el final. De este modo, el tiempo se aprovecha mucho más y la motivación de todos los asistentes es mayor porque saben que no serán víctimas del aburrimiento en medio de una reunión interminable. Por otra parte, para garantizar la eficacia en una reunión laboral también es esencial, respetar los turnos de palabra, tener humildad y dejar que todos los asistentes se expresen con libertad.

Es positivo llevar una libreta para apuntar ideas que sean interesantes. De hecho, una reunión de trabajo implica proactividad, es decir, capacidad por parte de los asistentes de compartir inquietudes, aportar nuevos puntos de vista e ideas que pueden mejorar el trabajo en equipo o el proyecto de fondo de la empresa. Algunos trabajadores por timidez prácticamente nunca se animan a dar el paso de compartir lo que saben con los demás. Hoy te propongo afrontar ese miedo asumiendo que no se puede agradar a todo el mundo.

Por otra parte, las reuniones de trabajo también fortalecen el trabajo en equipo. El talento es mayor cuando se suma el trabajo de varias personas. Pero está claro que para trabajar en equipo se necesita resolver dudas, fomentar el diálogo y marcar unas directrices. Esta es una de las razones por las que una reunión de trabajo se convierte en el mejor espacio para el diálogo y para la receptividad mutua.

En una reunión de trabajo siempre se debe apagar el teléfono móvil y cuidar el lenguaje corporal. Por ejemplo, es un signo de mala educación y de falta de interés estar mirando el reloj todo el rato con gran impaciencia.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *