1. Reinterpreta el significado del futuro analizado desde la incertidumbre

La incertidumbre nunca va a desaparecer (en ningún ámbito de la vida). Sin embargo, cuando únicamente se valora desde el miedo o la sensación de indefensión, surge una mentalidad que se aleja de la abundancia y se acerca a la escasez.

Recupera la capacidad de ilusionarte con aquello que puede pasar, especialmente, si te implicas y trabajas para que suceda. Los factores más negativos son una posibilidad. Pero también es probable que ocurran otras alternativas (algunas de ellas quizá pasen desapercibidas para ti en este instante).

2. Modifica tu diálogo interior: ¿Qué palabras te repites a ti mismo?

La abundancia o la escasez pueden manifestarse principalmente a través del diálogo interior. Esta última se alinea con expresiones habituales como «no puedo», «es imposible» o «no tengo suerte». La abundancia no significa caer en el autoengaño o creer que no hay límites en la realidad. Sin embargo, muestra una visión más esperanzada del presente y el futuro. Nutre tu diálogo interior con expresiones, afirmaciones y conceptos basados en la superación, el éxito y la búsqueda de oportunidades.

3. Crea una estrategia para lograr tus objetivos

La abundancia y la escasez están muy vinculadas con las creencias potenciadoras o limitantes que acompañan a emprendedores, empresarios y autónomos. En última instancia, tú decides qué creencias quieres potenciar y cultivar de forma consciente.

Es decir, qué lado de la balanza alimentas. ¿Cuáles son tus próximos objetivos relacionados con el emprendimiento o la vida laboral? Define cuáles son esas metas que representan el éxito y la felicidad desde tu punto de vista. Y crea una estrategia para avanzar con paso firme y evolucionar en la dirección deseada.

4. Visualiza cada día

La visualización es una herramienta muy poderosa para conectar con el campo de la abundancia y las oportunidades. Sin embargo, la práctica de la meditación o la relajación no produce resultados inmediatos. Se convierte en hábito cuando se integra verdaderamente en la experiencia personal. En consecuencia, visualiza cada día el cumplimiento de aquellos objetivos que quieres conseguir. Recréate en los detalles de la imagen y en las sensaciones que experimentas.

5. Pon en valor tu talento y tus recursos internos

La creatividad tiene un valor incalculable como muestra el ejemplo de tantos profesionales creativos que consiguen avanzar para lograr objetivos relevantes incluso cuando no tienen tantos medios a su alcance. Para desarrollar y mantener una mentalidad de abundancia es importante que no des por supuesto el valor de aquellas fortalezas, capacidades, dones, habilidades y destrezas que puedes poner en práctica. Además, también tienes la posibilidad de seguir aprendiendo para sumar nuevos recursos a tu vida.

6. Comparte tus éxitos (y celebra los logros de quienes te rodean)

Una mentalidad poderosa inspira a los demás y se contagia. En consecuencia, comparte tus éxitos (incluso aquellos que te parecen menos relevantes). Y celebra los logros de quienes te rodean.

¿Quieres dejar atrás una mentalidad basada en la escasez para conectar con un punto de vista centrado en la prosperidad? Un proceso de coaching o la ayuda de un mentor también puede ayudarte.

1. Visión de la idea y el contexto: análisis DAFO

La perspectiva de una idea de negocio puede percibirse desde una óptica reduccionista cuando el emprendedor solo se fijia en las fortalezas. Conviene acotar la realidad del proyecto desde una mirada holística. Por ello, el análisis DAFO es una de las herramientas más utilizadas en el ámbito del emprendimiento. Aporta un esquema detallado para analizar las debilidades, las amenazas, las fortalezas y las oportunidades. Realiza una labor de investigación para conocer mejor el contexto, qué momento atraviesa el mercado y cuáles son los competidores.

2. Estrategia centrada en el cliente

El emprendedor puede conectar plenamente con su idea, pero lo realmente importante es que esta llegue al público objetivo. Por ello, una estrategia centrada en el cliente pone en el centro a quien aporta sentido al proyecto. El éxito de una propuesta crece en la medida en la que aumenta el nivel de conocimiento que el emprendedor tiene de los distintos perfiles de clientes. Cada uno de ellos posee sus necesidades.

3. Mentalidad emprendedora

El éxito no depende únicamente de la mentalidad, pero esta última puede impulsar el crecimiento y la superación de los desafíos. El camino, aunque resulte apasionante si se afronta de forma vocacional, también está condicionado por variables como los altos niveles de incertidumbre y de cambios que existen en el contexto actual.

Pues bien, la mentalidad emprendedora no es innata, sino que puede entrenarse de forma consciente en la práctica a través del coaching, el mentoring, la toma de decisiones… Si quieres cultivar la perspectiva de la mentalidad emprendedora, enfócate en la búsqueda de soluciones. Implícate en un proceso de mejora constante por medio de la formación, el networking, el desarrollo de otras competencias…

4. Visibilidad online

Como hemos comentado, es esencial crear una estrategia de orientación al cliente para potenciar el éxito de una idea de negocio. Pues bien, la visibilidad online del proyecto adquiere una relevancia esencial en la actualidad. Y el valor de la coherencia debe estar presente en los distintos canales en los que la idea de negocio muestra su proyección.

5. Crea una alianza con todo aquel que tiene una influencia en el proyecto

El emprendedor asume una importante responsabilidad en la gestión de su proyecto. Pero, incluso cuando no comparte su iniciativa con un socio, colabora con otros perfiles que están implicados de algún modo en el éxito del proyecto.

Por ejemplo, el servicio de los proveedores es clave para que una propuesta sea viable. Además, el profesional también puede formar un equipo con el personal que ha contratado. Para unificar las diferentes funciones en torno a un mismo objetivo, es aconsejable crear una alianza sólida.

6. Alinea el saber con el hacer

La materialización de una idea de negocio muestra la perspectiva práctica del hacer. Por ello, traslada aquello que sabes al plano de la experiencia. Alinea tus pasos con la dirección que potencia el éxito de tu iniciativa.

7. Gestión del presupuesto

La idea de negocio y su desarrollo potencial también debe ser económicamente viable. Por esta razón, es esencial gestionar el presupuesto, reducir algunos gastos, establecer prioridades… A este respecto, conviene recordar que la inversión en marketing nunca debe percibirse como una opción prescindible. Es fundamental para comunicar un mensaje directo al cliente. Elabora un presupuesto realista y aplícalo en la práctica para optimizar los recursos.

Si quieres crear las condiciones propicias para impulsar el éxito de tu idea de negocio, crea tu plan de acción.

1. Cuida del cliente y del equipo de trabajo

Conviene integrar esta doble perspectiva en la gestión del proyecto para alimentar el vínculo a largo plazo con dos de las figuras que influyen de forma decisiva en el éxito potencial: el público objetivo y los profesionales que componen el equipo, cada uno desde su punto de vista, forma parte del presente y el futuro de la entidad.

2. Mantén el foco, pero sé flexible en la forma de llegar hasta allí

El éxito del negocio requiere de una dirección clara. Por ello, es recomendable que como emprendedor mantengas la atención y la concentración en un propósito (aquel que aporta un sentido valioso al trabajo diario, incluso, en los momentos más difíciles). El realismo de la meta debe complementarse con otro ingrediente: la flexibilidad en la forma de llegar hasta allí. Se producen tantos cambios en el sector que quizá sea recomendable hacer algunas actualizaciones en el plan de acción o concretar una modificación significativa.

3. Estrategia para potenciar la presencia online del proyecto

Este es uno de los apartados que puede incluir el documento general. Es decir, la estrategia debe abordar otras cuestiones más concretas que repercuten en el propósito mencionado: alimentar el éxito de la entidad. Dicho éxito, en la actualidad, se alinea con una presencia online que transmite cercanía, coherencia, confianza y seguridad. Por esta razón, puedes elaborar una secuencia de pasos para potenciar la imagen de marca del proyecto en el marco digital.

4. Conecta con la fuerza de lo local

Actualmente, un negocio puede llegar a evolucionar hasta tener un alcance global. Sin embargo, las decisiones locales también son muy importantes en un proyecto. Es decir, puedes establecer vínculos fuertes con proveedores que trabajan en la zona. Tienes la posibilidad de vincular el proyecto con acciones positivas que fomentan la creación de empleo, mejoran la calidad de vida de los vecinos del lugar y cuidan la naturaleza por medio de una actividad que se alinea con la protección del entorno.

5. Utiliza la tecnología como una aliada

Actualmente, la tecnología es uno de los recursos clave en negocios y empresas. La inversión en recursos técnicos que se utilizan de forma consciente puede repercutir en el éxito de un proyecto. Sin embargo, que los recursos mencionados sean tan prácticos no significa que sean un fin en sí mismo. Es decir, tienen un valor instrumental. Pero en ningún caso sustituyen otros factores humanos que son tan importantes en el ámbito comercial: la comunicación asertiva, la inteligencia emocional o el vínculo personal.

6. Trabaja en las áreas de mejora del negocio

No ignores el potencial, la capacidad de evolución o la fuerza del proyecto. Sigue profundizando en las fortalezas, aspectos que funcionan y cualidades valiosas del negocio. Pero, si quieres impulsar el éxito del proyecto, es fundamental que trabajes en la mejora permanente de aquellas áreas que presentan carencias, límites o errores repetidos.

El marketing creativo marca la diferencia porque deja huella

El marketing incide directamente en el éxito de un negocio siempre que muestra su lado más creativo y se estructura en torno a una estrategia coherente.

El verano te ofrece un buen momento para el descanso en tu rutina como emprendedor. Y también aporta una perspectiva clave para planificar un nuevo ciclo que comienza en septiembre.

1. Ciberseguridad en negocios grandes y pequeños

Emprendedores y empresarios ponen una atención especial en las medidas de protección que se contextualizan en las instalaciones de la entidad. El reto de la seguridad en el escenario actual va más allá de los sistemas empleados para fortalecer los edificios y espacios interiores. La ciberseguridad es un ejemplo de ello: un asunto que no ocupa, únicamente, a las grandes compañías.

2. Transformación digital en negocios grandes y pequeños

Una iniciativa que, más allá de su dimensión y naturaleza, experimenta un proceso de evolución cuando se transforma a través de diferentes medidas. Y la transformación digital es una necesidad incluso para los pequeños negocios que pueden quedar estancados si posponen un paso que ya han dado otras muchas empresas.

3. Mantén el control de los gastos principales y los ingresos

Las decisiones de un negocio, incluso aquellas que se perciben como una inversión, pueden ponerse en relación con el presupuesto que resulta viable en el proyecto. En consecuencia, es recomendable mantener un óptimo control de los principales gastos (fijos y variables). Por otra parte, también es aconsejable poner el foco en los ingresos.

4. Planificación estratégica en negocios grandes y pequeños

La planificación es una medida esencial en negocios grandes y pequeños en un periodo como el actual, puesto que el cambio constante se alinea con la necesidad de adaptación continua. Es decir, es fundamental no adoptar una postura que sea únicamente reactiva a partir de los acontecimientos que irrumpen en el proyecto. La planificación estratégica es clave para alimentar la perspectiva proactiva, definir objetivos y anticipar soluciones.

5. Objetivos de marketing para pequeños y grandes negocios

Una estrategia de marketing eficaz es clave en pequeños y grandes negocios. Evidentemente, cada proyecto corporativo posee diferentes medios para elaborar un plan de acción que refuerce el nombre de la entidad. Incluso cuando el presupuesto es ajustado, es esencial definir los próximos objetivos de marketing a corto, medio y largo plazo.

6. Proveedores que comparten los valores del negocio

Conviene indicar que la colaboración con los proveedores también es decisiva en negocios grandes y pequeños que ofrecen un excelente servicio al cliente contando con diferentes alianzas. Además de analizar la oferta de cada proveedor, conviene que este comparta algunos de los valores del negocio para que el vínculo perdure con los años.

7. La visión del cliente y del equipo son muy importantes

La experiencia del cliente pone el foco en la valoración que la persona realiza a partir de la atención recibida, la calidad del producto que ha adquirido o cualquier otro factor que se integre en el proceso. Su figura es muy importante, así como es recomendable alimentar el salario emocional de los empleados que, en su labor diaria, atienden a los compradores.

8. Diferenciación

Un negocio grande o pequeño se diferencia más allá de su tamaño o del número de empleados. Sin embargo, la diferenciación no es la consecuencia inmediata del trabajo bien hecho, sino un resultado que la entidad busca de forma consciente para presentar su propuesta de valor y su oferta de calidad ante el público objetivo. En definitiva, no hay una receta que de manera universal indique cuál es el secreto de la diferenciación ante los competidores porque este plan de acción es siempre irrepetible (se alinea con el nombre del negocio, con sus fortalezas y con el contexto).

Gestionar un negocio grande o pequeño siempre es un reto, aunque el proceso también tiene la perspectiva de la oportunidad.

1. Felicidad organizacional

La visión de la felicidad como parte del desarrollo profesional empieza a estar más presente en el mundo de la empresa. Así lo muestra el happiness management, una tendencia creciente en el sector de los recursos humanos. Desde esta perspectiva, existe una coherencia entre las metas empresariales y el bienestar de los trabajadores. No solo importa la productividad, también es clave el salario emocional.

2. Planificación estratégica

Los objetivos de empresa incluyen en la evolución y éxito a largo plazo. Sin embargo, una entidad no consigue sus metas más relevantes a partir de decisiones que surgen desde la improvisación o la falta de coherencia con un plan perfectamente estructurado. Por este motivo, la planificación estrategia describe esa hoja de ruta que sirve de guía a una compañía que avanza en armonía con los propósitos que desea alcanzar. La planificación estratégica tiene en cuenta la perspectiva temporal por medio de la definición de objetivos específicos a corto, medio y largo plazo.

Los objetivos seleccionados describen una dirección que conecta con el escenario deseado. Esa realidad potencial debe ser viable a partir de la situación interna de la empresa. En definitiva, la planificación estratégica es fundamental para crear condiciones propicias para el éxito empresarial.

3. Transformación digital, un proceso muy importante

Las empresas afrontan numerosos procesos hoy en día. Procesos que giran en torno a objetivos distintos. Pues bien, la transformación digital es uno de los retos que no conviene aplazar porque incide directamente en la innovación, evolución y posicionamiento de un proyecto. Es una transformación que parece centrarse, principalmente, en la perspectiva tecnológica. Pero el conocimiento humano y el desarrollo de nuevas competencias también se integran en el proceso.

4. Foco, elemento clave en las empresas de éxito

Las empresas afrontan el desafío del cambio, pero también descubren las oportunidades que existen más allá del escenario conocido. El cambio se integra en el contexto de la entidad. Forma parte de su realidad exterior y de su estructura interna. En definitiva, el responsable de la empresa puede observar y atender las múltiples variables que se enmarcan en el horizonte inmediato.

Pues bien, el foco es ese factor que influye directamente en el éxito empresarial. El foco recuerda qué es lo más relevante. Es decir, ayuda a clarificar las prioridades.

5. Mejorar los procesos para simplificar las dificultades

Una empresa de éxito escribe una historia que pone en valor la importancia de la formación continua y la innovación. Los procesos pueden revisarse, modificarse y perfeccionarse con un propósito positivo. Por ejemplo, las medidas puestas en marcha pueden ser esenciales para simplificar la realización de varias tareas, generar alternativas positivas o mejorar los resultados. Pues bien, es aconsejable realizar un registro de los cambios desarrollados para documentar la información.

6. Aprendizaje organizacional en las empresas actuales

El aprendizaje es un factor que, con relativa frecuencia, se evalúa a partir de las necesidades específicas de un puesto de empleo. Sin embargo, tiene una perspectiva diferente en el contexto de las empresas actuales. En ese caso, alcanza una dimensión holística que integra de forma proactiva a quienes componen un proyecto. Es decir, el aprendizaje organizacional favorece el crecimiento individual y de equipo, pero trasciende más allá del grupo porque tiene un impacto sistémico.

Por tanto, algunos factores de la empresa muestran una conexión de causa y efecto. En otros casos, se produce una interconexión entre variables que componen un sistema.

1. Emprender en ciberseguridad

La seguridad online es un tema esencial en cualquier tipo de negocio. Actualmente, la protección de las instalaciones se amplía más allá del espacio físico. Las amenazas potenciales, que pueden poner en riesgo la fortaleza del proyecto, también se desarrollan en el contexto digital.

Por ello, las medidas de ciberseguridad son tan importantes actualmente en empresas y negocios. Pues bien, este sector ofrece opciones de emprendimiento que destacan por su alto nivel de especialización.

2. Emprender un negocio centrado en la tercera edad

El envejecimiento de la población crea un nuevo contexto a nivel social. Crece el número de personas mayores que no solo pueden requerir cuidados especializados. Con frecuencia, las ideas de negocio que se enmarcan en el ámbito de la tercera edad se centran en la atención y la protección de la salud.

Pero existen otras muchas necesidades que conectan con el bienestar emocional y el desarrollo pleno de hombres y mujeres que tienen más de 65 años. El proyecto de emprendimiento puede orientarse hacia el tiempo de ocio, la formación, las finanzas o la decoración.

3. Formación online

Las tecnologías han transformado el mundo del trabajo y el campo formativo. El aprendizaje online refleja el valor de esa evolución. Pone un gran número de recursos educativos al alcance de muchos alumnos que, por diferentes razones, no pueden asistir a clases presenciales (o prefieren disfrutar de la flexibilidad que aporta el estudio a distancia).

Muchos adultos sienten el deseo o la necesidad de reinventarse profesionalmente por medio de un periodo de preparación. En otros casos, la realización de un curso responde a un interés personal. Pues bien, el sector de la formación online vive un tiempo de evolución y consolidación, puesto que su oferta se amplía con numerosas temáticas.

4. Emprender un negocio en el sector de la cosmética

Uno de los sectores más demandados es el de la cosmética. Un campo que presenta un extenso catálogo de fórmulas especializadas en el cuidado de cada tipo de piel. Proporciona una agradable experiencia de bienestar y cuidado. Su influencia va más allá del plano corporal o estético. Una rutina de belleza, adaptada a la edad y estilo de vida, también alimenta la autoestima personal.

Por otra parte, es un sector que incrementa sus ventas en fechas tan comerciales como la Navidad, San Valentín o el Día de la Madre. Aporta múltiples ideas de regalo para hombres y mujeres de distintas edades. ¿Quieres emprender en el mundo de la cosmética? Es un campo con mucho futuro. Hay una tendencia que triunfa en el campo de la cosmética: la búsqueda de la naturalidad en la elección de los ingredientes. Del mismo modo, los valores sostenibles potencian la imagen positiva del negocio.

5. Emprender un negocio especializado en el sector de la logística

La elección de un sector para emprender no depende, únicamente, de las oportunidades de futuro que ofrece un ámbito concreto. También puedes reflexionar sobre tu propia formación y expectativas personales con el objetivo de alinear una idea de negocio con un reto que te ilusione realmente. Si quieres emprender un proyecto especializado en logística, ten en cuenta que el futuro de este sector avanza en sintonía con el desarrollo tecnológico.

Los sectores de la ciberseguridad, la tercera edad, la formación online, la cosmética y la logística viven un momento de éxito y tienen un gran futuro.

1. Conocimiento de las nuevas tendencias de la industria

El universo de la moda se caracteriza por el cambio constante y la irrupción de nuevas tendencias. Es decir, es una industria que evoluciona y se adapta a nuevas expectativas. Por ejemplo, el slow fashion se distancia de los procesos habituales de la producción rápida. Es un enfoque que incrementa la sostenibilidad y la responsabilidad en la selección de los materiales y en la elaboración de los productos. Una tienda de moda de autor es otra propuesta interesante.

2. Desarrollo de habilidades creativas y artísticas

Un negocio de moda no solo requiere de una óptima gestión de las finanzas. Es esencial atender los gastos que hacen posible la actividad del negocio. Pero el sector de la moda se caracteriza por su creatividad. Por este motivo, el emprendedor puede ampliar su formación con cursos que propician la adquisición de nuevas destrezas. Por ejemplo, el dibujo es muy importante en ropa, joyería y complementos.

Es esencial para realizar los bocetos de los diseños que sirven de referencia en la elaboración de nuevos productos. Por este motivo, la formación en dibujo no solo puede ayudarte a plasmar tus propias ideas, sino también a entender mejor otras fuentes de inspiración.

3. Precios realistas y rentables

La diferenciación por precio destaca en el mundo de la moda como una alternativa para despertar el interés de los clientes. Sin embargo, el éxito del proyecto debe afianzarse con unos costes que son realistas a largo plazo. Es decir, hay diferentes gastos fijos y variables que forman parte del presupuesto. La producción y la venta de los artículos del catálogo requiere de una infraestructura.

4. Planificación de campañas de marketing

El marketing está muy vinculado a los diferentes periodos del calendario que incrementan las ventas en el sector de la moda. La Navidad y las rebajas de verano destacan por su valor comercial en el calendario anual.

Pero las ventas no se reducen a esta etapa. Es importante crear expectativas positivas en torno a otras fechas significativas como San Valentín o el Día del Padre. La anticipación y la planificación refuerzan la creatividad en las acciones de marketing.

5. Cuida la visibilidad del logotipo en cada tipo de soporte

El logotipo de un negocio de moda está presente en distintos canales online y offline. También personaliza los regalos comerciales que el proyecto ofrece a los clientes en Navidad o en fechas especiales. Del mismo modo, se integra en el embalaje de los productos, puesto que la presentación de los regalos incrementa el valor de los artículos. El logotipo identifica al proyecto de moda por medio de un distintivo visual que debe visualizarse en los apartados más importantes del negocio.

6. Integra tus objetivos en un proyecto a largo plazo

El éxito en el sector de la moda se afianza con la conquista de metas que se enmarcan en un proyecto centrado más a largo plazo. Una marca de ropa puede alinear su estrategia con el objetivo de potenciar su presencia en nuevos puntos de venta. Por ejemplo, una firma tiene la posibilidad de llegar a formar parte de tiendas multimarca. Otros proyectos del sector textil elaboran un plan de acción para reforzar el posicionamiento online.

En definitiva, es muy importante que tus objetivos más inmediatos también se alineen con una visión más a largo plazo si quieres potenciar el éxito en un negocio de la industria de la moda.

1. Analiza la viabilidad de los cambios llevados a cabo

Las medidas impulsadas para afianzar el crecimiento producen consecuencias en la estructura interna de un negocio. Por ejemplo, la entidad debe contar con más recursos para atender un mayor volumen de pedidos. Es decir, adopta una mentalidad positiva ante los nuevos retos (pero ajusta tus expectativas si crees que son demasiado elevadas).

2. Reforzar los aciertos y aquellos aspectos que funcionan

El camino previo proporciona una información valiosa para impulsar la etapa de consolidación de una entidad. Es esencial contextualizar los aciertos y las variables que funcionan. Tal vez sea recomendable implementar algunos cambios para solucionar aquellas cuestiones que obstaculizan el desarrollo corporativo. Pues bien, las novedades se implementan sobre la base de aquellos detalles que aportan frutos positivos.

3. Campañas de marketing

Aunque el negocio experimente una línea ascendente, necesita dar a conocer su catálogo. Es decir, el marketing pone el acento en las ventajas y beneficios de los productos y servicios disponibles.

Las acciones llevadas a cabo conectan con los clientes potenciales, mejoran el posicionamiento online del negocio y fortalecen el nombre de la entidad. Cada campaña debe seguir una estrategia concreta para lograr objetivos que se contextualizan en una etapa de crecimiento. En definitiva, cuida la experiencia de cliente desde un enfoque integral.

4. Establecimiento de objetivos temporales

Desde la perspectiva actual puedes analizar el periodo de crecimiento que el negocio ha protagonizado. ¿Durante cuánto tiempo se ha desarrollado? ¿Qué puntos de inflexión se han materializado en ese contexto?

¿Qué hechos han creado un impacto positivo en la historia de la entidad? Del mismo modo, para fortalecer los cimientos de los éxitos previos, define los objetivos a corto plazo.

Pero amplía la planificación de futuro más allá de lo inmediato: ¿Qué propósitos a medio y largo plazo se presentan como un reto apasionante? El crecimiento sostenido en el tiempo no es fruto de la casualidad. La planificación y la estrategia son fundamentales para crear una entidad consciente.

5. Analiza todo el contexto

La fase de crecimiento se percibe como un proceso apasionante. Visualiza aquellos propósitos que quieres lograr. Alimenta tu autoconfianza por medio de la práctica de la atención plena. Pero no caigas en el plano de la idealización. Incluso cuando percibas factores favorables para alcanzar el éxito en el entorno, las amenazas y obstáculos forman parte del plan de acción.

Además, los cambios repentinos son habituales en un contexto incierto como el actual. Por tanto, diseña una estrategia práctica, pero flexible. Es recomendable que el guion esté abierto a la posibilidad de impulsar un concepto alternativo.

6. Fórmate para desarrollar nuevas habilidades

Un negocio en crecimiento requiere de más recursos técnicos y humanos. Por ello, amplía tu formación con cursos y talleres que te aporten un marco de referencia para aprender. La suma de habilidades y competencias es fundamental para tomar decisiones. Analiza tu currículum y alinea tu plan de formación con aquellas áreas en las que necesitas ampliar tu conocimiento.

¿Cómo consolidar una fase de crecimiento en el negocio a lo largo del año? Que una estrategia funcione ahora no implica que siempre dé buenos resultados. Por tanto, toma decisiones conscientes en la gestión de tu proyecto a largo plazo.

1. Transforma el fracaso en una fuente de aprendizaje

Las personas que inspiran con el cumplimiento de metas significativas, no han vivido en un estado permanente de triunfo. Los objetivos no cumplidos aportan grandes lecciones.

Pero el miedo al fracaso puede convertirse en el freno definitivo de un proyecto potencial. El aprendizaje de una mentalidad de éxito no está determinado por circunstancias externas que son cambiantes y temporales. Existe una base más permanente que transforma la realidad a través del conocimiento: la constancia.

2. Amplía el campo de posibilidades

Las opciones de éxito se reducen cuando una situación se describe de una forma lineal. En ese caso, las perspectivas del éxito parecen limitarse a un único camino. ¿Pero qué ocurre cuando amplías el campo de opciones a través de la creatividad, la innovación y la búsqueda de nuevos horizontes? El mapa de acción se enriquece con matices que habían pasado desapercibidos previamente.

3. Elabora tu proyecto de vida profesional

Existen factores que son fruto del azar y suponen un impulso positivo en el camino hacia el triunfo. Sin embargo, la mentalidad de éxito se alinea con una buena planificación. Es decir, crea una estrategia que te ayude a recorrer el camino que separa el escenario en el que te encuentras actualmente y el horizonte que quieres conquistar.

Diseña un proyecto de vida profesional que integre los objetivos alcanzables que deseas conseguir a corto, medio y largo plazo. La realidad es dinámica y cambiante. Por ello, la previsión inicial también debe sumar la flexibilidad necesaria para responder ante cualquier imprevisto.

4. Conecta con el proceso porque es parte del éxito

El éxito va más allá de los resultados. De hecho, es muy importante que disfrutes del proceso, porque los resultados forman parte del plan de acción a nivel potencial. No pierdas la perspectiva de aquello que es relevante para ti en este momento. La formación, el aprendizaje, el fortalecimiento de la autoestima, el trabajo en equipo, la creación de una marca personal, la celebración de los pequeños logros… Todos esos factores están integrados en el camino hacia la meta.

5. Amplía tu educación financiera con cursos y mentoring

El éxito en los negocios no se reduce al plano económico. Sin embargo, existen muchas decisiones que pueden tener un impacto negativo en el ámbito de las finanzas. Por ello, la educación especializada, que proporciona recursos y conocimientos en torno a inversiones, ahorro, productos financieros y hábitos positivos, prepara al emprendedor para afrontar nuevos desafíos.

En definitiva, la ampliación del conocimiento evita que permanezcas durante más tiempo en la zona de confort. Adquieres una visión que aporta el contenido necesario para encontrar respuestas significativas y para hacer nuevas preguntas.

6. Alinea tu visión con un valor que tiene un efecto positivo en la sociedad

Con frecuencia, el éxito personal se interpreta desde una perspectiva individual. Así ocurre cuando el sujeto experimenta los beneficios positivos de sus aciertos.

Pero en el éxito verdadero existen muchos factores interconectados que describen una imagen trascendente del triunfo. Por ejemplo, cuando una persona realiza su vocación profesional, experimenta momentos de felicidad en su carrera profesional. Además, su labor supone una aportación que es percibida de forma positiva por terceras personas. Es decir, conviene ampliar el foco más allá del yo, para no perder de vista al público objetivo.

1. Digitalización

Las nuevas tecnologías forman parte de la consolidación de un proyecto. Pero deben utilizarse con un fin práctico para iniciar procesos que impulsen la excelencia.

2. Desarrollo de medidas de conciliación

El éxito empresarial es posible gracias a los profesionales que forman parte del organigrama. Las medidas de conciliación son esenciales para retener el talento a largo plazo. Y, por tanto, aportan una mayor estabilidad al equipo.

3. Objetivos de marketing digital

Existen distintas acciones de marketing que una empresa puede impulsar para conectar con su público potencial. La innovación presente en este ámbito pone de manifiesto la importancia de la inversión en marketing digital.

4. Dejar una huella positiva en el entorno

El éxito empresarial puede analizarse desde el punto de vista del beneficio. Pero el crecimiento de un proyecto es todavía mayor cuando su actividad también repercute de forma positiva en el contexto en el que se enmarca. Por ello, un negocio puede comprometerse con metas que impulsen el desarrollo y las oportunidades de empleo en la zona.

5. Identificar y trabajar las áreas de mejora

Una empresa puede apoyarse en sus aciertos y fortalezas. Sin embargo, los negocios se sitúan en escenarios cambiantes y complejos. Que algo haya dado buenos resultados hasta el momento, no significa que siempre sea un acierto. Y, por otra parte, para impulsar un cambio significativo también necesita conocer cuáles son sus áreas de mejora. De este modo, tiene la posibilidad de trabajar en ellas.

6. Planificación y control de las finanzas

La planificación y el control, además, también deben estar acompañados por el seguimiento. Es esencial utilizar de forma adecuada los medios disponibles. Y las decisiones tomadas están alineadas con el diagnóstico de situación.

1. Inspirar confianza ante compradores potenciales

Las experiencias de compra positivas dejan una huella agradable en la memoria del cliente. A partir de sus propias vivencias puede extraer conclusiones sobre la calidad de la atención recibida. Pero la confianza es un ingrediente que influye en las decisiones del consumidor, incluso, antes de elegir un producto. Una imagen corporativa sólida transmite credibilidad y cercanía. Conviene aclarar que una imagen positiva no solo ayuda a conectar con el público objetivo. El prestigio alcanzado por una entidad potencia el reconocimiento por parte de la sociedad.

2. Impulsar las ventas

Las empresas invierten en campañas de marketing y acciones de publicidad para realzar la visibilidad de sus productos. Una promoción eficaz es clave para persuadir a la audiencia. Sin embargo, más allá de cualquier estrategia comercial, existe un ingrediente que influye significativamente en las ventas: una imagen corporativa fuerte y sólida. Un elemento que refuerza la diferenciación del proyecto ante otros competidores del sector.

3. Fortalecer la resiliencia empresarial

Un negocio puede experimentar una gran variedad de circunstancias diferentes. Por ello, la resiliencia corporativa muestra el poder que una entidad tiene de sobreponerse más allá de los obstáculos. Y la identidad corporativa es clave para impulsar la capacidad de transformación, aprendizaje, actualización y renovación.

4. Atraer y mantener el talento

Los clientes de un negocio deben sentirse especialmente cuidados. Pero el talento especializado es otro factor a tener en cuenta. El perfil de los profesionales que trabajan en el negocio o que desean formar parte del equipo. Una imagen corporativa sólida influye en la decisión de quien presenta su autocandidatura ante el responsable de recursos humanos.

Cuatro beneficios de una imagen corporativa fuerte que conviene valorar en la sociedad actual para hacer frente a un tiempo de incertidumbre.

1. Identifica tu punto ciego

Todo profesional tiene debilidades y carencias, sin embargo, no siempre es consciente de ellas. También puede ocurrir que un perfil tenga un talento que no potencia de forma consciente. El punto ciego es ese ingrediente que está obstaculizando tu evolución como consecuencia del propio desconocimiento.

2. Afronta las metas pendientes, aquellas que has pospuesto

Con frecuencia, el punto de inflexión definitivo en la carrera de un profesional llega con la atención a las decisiones pendientes. A través de este proceso puedes darte la oportunidad de dedicar tiempo a un objetivo que es relevante. Una meta que puede producir un cambio muy importante en tu carrera.

3. Fortalece y nutre tu autoestima

La autoestima es un pilar importante en la carrera profesional. De hecho, alimentar el amor propio es un aspecto clave para no confundir el valor personal con los objetivos alcanzados o las expectativas no cumplidas. Una autoestima alta influye de forma positiva en la autoconfianza.

Una autoconfianza que es tan importante durante el proceso de búsqueda activa de empleo, en el emprendimiento o en una entrevista laboral. Agradece todo aquello que el tiempo y la experiencia han aportado a tu vida profesional y personal. Ahora dispones de conocimientos que no tenías cuando te encontrabas al inicio de tu carrera. Por tanto, conecta con el plano de las fortalezas en lugar de centrarte, únicamente, en posibles carencias.

¿Cómo impulsar tu carrera profesional después de los 50? Diseña un plan de acción personalizado por medio de un proceso de coaching.

1. Reduce el riesgo

Más allá de su efecto inmediato, muchas acciones tienen consecuencias a largo plazo. Por ello, encuentra el equilibrio en el emprendimiento para minimizar el riesgo. La ambición positiva es aquella que está alineada con el sentido de la humildad. Desarrolla un plan realista y flexible, que contemple distintas alternativas.

2. Formación permanente para desarrollar nuevas habilidades

La preparación está directamente vinculada con el aprendizaje. La formación permanente es el complemento ideal de un currículum que muestra la implicación profesional de quien desea adquirir nuevas habilidades y competencias.

3. Crea una red de apoyo

¿Cómo reducir el vértigo que produce el exceso de responsabilidad cuando se percibe desde la soledad? Es positivo que cuentes con una red de apoyo que va más allá del propio trabajo en equipo. Por ejemplo, puedes reforzar el networking para establecer nuevas alianzas. Del mismo modo, quizá decidas comenzar un proceso de mentoring.

4. Identifica las creencias limitantes en torno al éxito

Existen diferentes formas de interpretar el triunfo, pero no todas las personas se sienten cómodas con la idea de alcanzarlo. Existen creencias que muestran una forma de autoboicot en el camino hacia la meta. Por ello, el primer paso para generar otras alternativas potenciadoras es identificar esos mensajes repetitivos que se asemejan a un disco rayado.

Visualiza el momento en el que has logrado aquellos objetivos que te habías marcado. La visualización es un ejercicio que incrementa la seguridad y la confianza.

5. Ejercita un liderazgo consciente

Un liderazgo consciente muestra una capacidad de influencia positiva que inspira a los demás por medio de la fuerza que producen las palabras y las acciones.

1. Avanzar hacia una nueva realidad

La realidad no es estática. El escenario conocido por el negocio puede transformarse de forma definitiva a partir de diferentes causas externas. Permanecer estancado en la situación previa, en este caso, impide ofrece soluciones que sean acordes al nuevo contexto.

2. Reinventar el marketing

El propósito de reinventar un negocio puede interpretarse de forma holística. Este cambio afecta a todas las áreas del proyecto. El marketing es uno de los ingredientes que, actualmente, ofrece múltiples posibilidades creativas. Existe un amplio catálogo de acciones online y offline para transmitir la propuesta de valor a los clientes.

3. Aprender del ejemplo de negocios con una larga historia

Un negocio centenerio pone de manifiesto cómo el éxito fue posible gracias a la participación de distintas generaciones. Pero una historia de estas características no es lineal. La innovación y la evolución enriquecen a aquel proyecto que conquista nuevas metas.

4. Llegar al público objetivo y conseguir nuevos clientes

Las expectativas y prioridades de los consumidores cambian a lo largo del tiempo. Y el negocio, si quiere seguir creciendo, debe dar una respuesta a las nuevas necesidades. Reinventar un negocio no es sinónimo de éxito, pero es un paso clave para incrementar las opciones de acierto.

5. Competir con aquellos negocios que ya se han reinventado

Existen muchos proyectos que pueden inspirarte con su ejemplo para dar el paso de alcanzar esta meta. Un negocio compite con otras empresas que ofrecen un servicio innovador. Por tanto, esta evolución también puede formar parte de una estrategia de diferenciación que sea eficaz.

En conclusión, enumera tus razones para reinventar tu negocio en Año Nuevo o más a largo plazo.

Equipo

Los procesos de selección son importantes como medio para identificar el talento. La estabilidad en la plantilla de trabajo, incluso cuando se trate de un proyecto formado por pocas personas, es esencial porque los trabajadores son protagonistas en este objetivo de generar valor. Convierte la felicidad y no solo la productividad en un tema importante para el negocio. Aplica el ingrediente de la innovación a las distintas esferas de tu negocio, también a los recursos humanos.

Colaboración entre la universidad y la empresa

Las empresas pueden generar valor como escenario de nuevas oportunidades profesionales mediante el establecimiento de alianzas con universidades y centros de formación profesional. Jóvenes estudiantes pueden realizar un periodo de prácticas, sumando aprendizaje a su vida.

Estrategia comercial

Diseña el plan de acción comercial de tu negocio para mantener el foco de atención en el objetivo principal que marca la dirección de esta acción llevada a cabo por aquellos profesionales que realizan esta labor comercial. Además de ofrecer un buen producto, añade también la calidad del asesoramiento personalizado en el proceso de compra.

Marketing de contenidos

En una escuela de coaching, por ejemplo, el marketing de contenidos se convierte en una forma de generar valor al compartir información sobre bienestar emocional y superación con el gran público. Muchas de esas personas nunca visitarán el centro, sin embargo, sí tienen la oportunidad de nutrir su felicidad con los contenidos escritos por expertos en esta materia. Este ejemplo puede aplicarse a distintos sectores del mercado.

Utiliza los medios tecnológicos como recursos que te acercan a la persona. Más allá del aspecto técnico, el cliente es el verdadero protagonista que aporta sentido a la labor diaria desarrollada por el equipo.