1. Papeleta de conciliación

Existen conflictos entre empresas y trabajadores que se resuelven a través de un proceso judicial que da lugar a una resolución. Sin embargo, existen otros pasos previos que pueden propiciar la solución del hecho planteado en el artículo. La papeleta de conciliación es un recurso práctico para facilitar el acuerdo entre las partes por medio de un camino administrativo. En este caso, el profesional opta a una vía diferente a la judicial y elige la mediación. En la papeleta presentada se especifica cuál es el motivo que justifica la petición planteada y se aporta la información correspondiente.

Es importante que la empresa acuda en la fecha indicada al acto de conciliación. Crea el contexto adecuado para que las partes implicadas alcancen un acuerdo. Durante el encuentro, las partes profundizan en los puntos expuestos previamente en la papeleta. Con frecuencia, la mediación se presenta como un paso previo que supone una alternativa a un proceso judicial que es más complejo. Por ello, si la entidad no cumple con el acuerdo alcanzado en esta etapa, hay que contemplar otras medidas de solución.

Cuando esta circunstancia se prolonga en el tiempo, los derechos del trabajador son vulnerados. La entidad no cumple con su compromiso en relación con el pago del salario correspondiente. Este factor puede propiciar una solicitud de la extinción del contrato como consecuencia de un motivo justificado. De este modo, la finalización del vínculo contractual puede propiciar que el profesional opte a una prestación por desempleo, si cumple con las condiciones necesarias a nivel legal. También puede recibir una indemnización similar a la que se contextualiza en un proceso por un despido improcedente (conviene recordar que el empleado no abandona su puesto de empleo).

2. Es posible solicitar la extinción del contrato

¿Cuándo es posible comenzar este proceso? Conviene señalar que el hecho ocurrido no debe ser puntual, sino frecuente y repetitivo. El profesional tiene la posibilidad de plantear la solicitud de extinción del contrato al margen de cuáles sean las circunstancias específicas de la entidad. Es decir, aunque la empresa no esté atravesando un buen momento, puede valorar esta posibilidad.

Cuando se produce una situación de este tipo, es importante que el empleado busque asesoramiento legal para defender sus derechos. Cada caso presenta variables particulares, por ello, es aconsejable que un experto en derecho laboralista analice la realidad con detenimiento. En un escenario de este tipo, es importante hablar con la empresa. Sin embargo, a pesar de mostrar una disposición para el diálogo, puede ocurrir que el compromiso mostrado en un primer momento no se cumpla en la práctica.

Es decir, quizá la realización de los pagos correspondientes se prolongue durante más tiempo todavía. Si tu empresa deja de pagarte, es esencial que tengas en cuenta que dispones de un plazo de tiempo específico para completar los trámites. La reclamación debe formalizarse durante el primer año. Es decir, la reclamación debe presentarte durante dicho periodo de tiempo porque a partir de ese momento cambia el contexto.

¿Qué hacer si tu empresa deja de pagarte? Es importante que protejas tus derechos desde el punto de vista legal. Por ello, consulta el caso con un abogado. Pero, además, cuídate a nivel emocional porque esta situación puede producir estrés, preocupación, incertidumbre ante el futuro o sensación de vulnerabilidad.

Cotización mínima del autónomo

Sin embargo, también es cierto que cotizar el mínimo tiene inconvenientes. Uno de los más importantes, en relación con el futuro, es decir, desde la perspectiva de la jubilación. Por esta razón, algunos autónomos también empiezan a planificar su futuro personal desde el punto de vista financiero por medio de un plan de pensiones privado. Otra situación en la que cotizar el mínimo supone un inconveniente se produce en el caso de vivir un periodo de baja laboral largo.

El autónomo tiene la obligación de cotizar al ejercer su actividad desde el instante en el que inicia su actividad. La cuota de autónomos se paga cada mes pudiendo hacerlo a través de la la Tesorería General de la Seguridad Social o por medio del pago bancario.

A partir de los 46 años, muchos autónomos deciden incrementar su base de cotización con la perspectiva de mejorar su pensión en la jubilación. Esta edad es especialmente significativa para tomar esta decisión. Los últimos años de cotización son los más determinantes para calcular la pensión del trabajador.

Aumentar la base de cotización

La base de cotización también puede condicionar la cuantía de una baja por incapacidad permanente o viudedad. Generalmente, el colectivo autónomo vive ligado al presente porque su situación le deja poco margen para planificar el futuro cuando en muchos casos, llegar a final de mes se convierte en una supervivencia que solo es posible a partir de la cotización mínima.

Sin embargo, en caso de que sea posible, incrementar la base de cotización también aporta ventajas de futuro que conviene valorar desde la perspectiva de la planificación de la situación económica del mañana.

Condiciones del permiso de paternidad

El disfrute de este tipo de prestación, que es independiente de la de la madre, es un subsidio que reconoce a los trabajadores el derecho a cesar su actividad en la oficina durante los días establecidos por ley. La prestación económica es un subsidio correspondiente al cien por cien de la base reguladora del sueldo del profesional.

Este permiso por paternidad reconoce el derecho de los padres a implicarse personalmente en el cuidado del bebé. Esto es importante para romper con estereotipos asociados a las diferencias de género, aunque todavía queda mucho camino por avanzar.

Para poder optar a este permiso por paternidad es muy importante que el trabajador esté de alta en la Seguridad Social o cobrando el paro, habiendo acumulado una cotización previa durante los últimos siete años de 180 días. O también, 360 días en el total de la vida laboral.

Cómo solicitar el permiso de paternidad

Desde el pasado 1 de enero de 2017, los padres españoles podrán beneficiarse del derecho a solicitar un permiso de cuatro semanas de duración. ¿Qué trámites deben llevarse a cabo para solicitar el permiso de paternidad? Si estás en este proceso, entonces, presenta ante la Seguridad Social, el documetno que te ha facilitado la empresa. Junto con una fotocopia de tu DNI y el libro de familia. También debes presentar un recibo en el que consta el número de cuenta en el que recibir el ingreso.

Tener una noción realista del sueldo

Uno de los factores que debes tener en cuenta en tus aspiraciones de sueldo es si estás optando a una empresa en expansión, o por el contrario, se trata de un negocio en su fase inicial. El sueldo también parte de las posibilidades reales que tiene una empresa de pagar una cantidad u otra a los empleados.

Además, es conveniente que tengas una mentalidad que vaya más allá del sueldo para valorar otro elemento clave en tu calidad de vida: el tiempo. Por ejemplo, tal vez la empresa se mantenga firme en el sueldo inicial, sin embargo, sí te permita una ventaja en el horario de trabajo o en la posibilidad de trabajar desde casa un día por semana.

Para negociar tu sueldo también es aconsejable que estés informado de cuánto se paga a los trabajadores en este sector profesional: ¿Existe una alta oferta de profesionales especializados que pueden cubrir las necesidades del sector? La valía de un profesional aumenta cuanto menor es su competencia.

Cuándo hablar del tema del sueldo

Espera hasta el momento en el que el entrevistador introduzca el tema del sueldo para iniciar la negociación. El punto en el que te mantengas firme en dicha negociación debe ser tu propia valía personal y todo aquello que puedes aportar a la empresa.

Tener un horario flexible

El tiempo también es un valor si tenemos en cuenta cómo intentamos estirarlo para abarcar distintas tareas a lo largo de la semana. Ofrecer un horario flexible, mejora la conciliación laboral de los empleados que además, también se sienten más libres. El margen de flexibilidad puede variar de acuerdo a los criterios de la propia empresa.

Horario de verano

En relación con el punto anterior, muchos trabajadores tienen horario especial de verano al hacer la jornada continua para tener la tarde libre en la oficina. Este tipo de ventaja se valora mucho además en meses de buen tiempo, vacaciones y descanso. Algunas empresas también mantienen este horario de verano durante los viernes de todo el año.

Acceso a cursos de formación

Algunas empresas invierten en formar a sus trabajadores. Y esto motiva mucho a aquellos empleados que sienten que forman parte de un entorno laboral que apuesta por su crecimiento y desarrollo.

Entrada libre para congresos

Tener una entrada asegurada para asistir a charlas y eventos organizados por la empresa también es una forma de reconocimiento que resulta atractiva para los empleados.

Mentoring en la empresa

Permitir que un profesional veterano oriente a un nuevo contratado para que se integre en su nuevo puesto de trabajo a través de una relación de mentoring que repite el esquema de maestro-aprendiz. Otra idea útil es facilitar a los empleados la comunicación de sus propias iniciativas a través de un buzón de sugerencias.

Aspectos a valorar

Para aumentar el sueldo de un trabajador, la empresa también debe estar en disposición de poder tomar esta decisión, por tanto, conviene analizar la situación económica que atraviesa el negocio.

Además, también conviene valorar la posibilidad de aumentar el sueldo de un empleado cuando lleva mucho tiempo trabajando por la misma cantidad de dinero. Un pequeño aumento puede ser uno de los medios más efectivos para revitalizar su motivación y su autoestima. Por otra parte, muchas empresas deciden tomar esta decisión como una forma de mantener el talento de aquellos profesionales a los que no se quiere perder y que, en caso de que no se sientan valorados, podrían buscar empleo en otra empresa.

Otras razones para aumentar el salario

Conviene aumentar el sueldo de un empleado cuando su balance de trabajo a lo largo del tiempo que ha estado desempeñando su función por un mismo sueldo, ha sido notable y la empresa tiene un nivel de satisfacción alto. Además, también conviene realizar un ejercicio de empatía para ponerse en el lugar de ese empleado. Si eres jefe puedes preguntarte: «¿Harías el trabajo que él hace por el precio que él cobra?». El mes de enero, como inicio de un nuevo ciclo, es un buen momento para valorar esta posibilidad.

Cuida tu lenguaje corporal al hablar sobre este tema, no te pongas tenso, es decir, intenta sonreír y no transmitas enfado o te sientas ofendido ante la menor negativa. Al negociar el sueldo, ten en cuenta que tienes que tomar como base la cantidad que te ofrecen, es decir, no puedes aspirar a ganar mucho más. Toda negociación se tiene que producir cara a cara y puede que el proceso implique más de una cita. En caso de trabajar desde casa, sí que tendrías que plantear la situación en un correo electrónico. Cuando te hagan una oferta, tómate un tiempo para pensar y no respondas de inmediato. Se trata de un tema serio.

Haz un balance de tus méritos: objetivos cumplidos en el último año, la trayectoria general que tienes en esa empresa, tu grado de satisfacción interior con tu situación presente, tus necesidades económicas… Se trata de puntos que luego tendrás que destacar cuando veas a tu jefe cara a cara. Sin duda, es mejor que programes la entrevista para una fecha y hora concreta, en vez de ir de improviso a su despacho. En ese caso, podrías elegir un momento poco adecuado y ten en cuenta que el tema del que quieres hablar es muy importante, por ello, pon de tu parte para crear un contexto adecuado.

Si para ti la necesidad de reconocimiento es vital para seguir motivado, entonces, no pospongas la situación. Toma la iniciativa y lucha por aquello en lo que crees. Si no lo intentas no sabes cuál puede ser la respuesta. Pero es muy importante que estés mentalizado, es decir, que asumas que la respuesta que obtengas no sea la esperada. En ese caso, tú también eres libre de elegir seguir trabajando en el proyecto o empezar a buscar otro empleo.

Tú eres libre frente a las circunstancias externas de elegir lo que mejor te convenga. No asocies un aumento de sueldo con un gesto de vanidad y de soberbia. Si tú crees que lo mereces, pídelo sin miedo.

¿Qué se debe de valorar a la hora de aceptar un trabajo? En primer lugar, si ese empleo está en la línea de tus inquietudes y de tu vocación personal. Si es algo que de verdad te gusta. Por supuesto, uno mismo también puede hacer balance y llegar a la conclusión de que le interesa estar ocupado en vez de tener el tiempo vacío, aunque sea con un empleo que no le entusiasma demasiado.

Por otra parte, también es fundamental mirar el horario de trabajo para ver si es compatible con la organización de otras funciones. Así sucede, por ejemplo, en el caso de esas personas que estudian y a la vez, también trabajan. Lo mismo puede suceder en el caso de que una persona tenga que compatibilizar su trabajo con la familia. A veces, puede no compensar la renuncia a la familia por un empleo. De hecho, así sucede en el caso de esas personas que libremente se quedan en casa cuidando de sus hijos.

Otro aspecto que se debe considerar a la hora de aceptar un empleo tiene que ver con las condiciones de dicho empleo. Puede suceder, por ejemplo, que un candidato no esté dispuesto a viajar constantemente por motivos laborales. En ese caso, es mejor tener sinceridad de expresar este sentimiento abiertamente. Para finalizar, se debe valorar el sueldo que se va a recibir por el trabajo realizado.

Es una suerte tener un trabajo, además, con un poco de imaginación también puedes adaptar tu tiempo de ocio al horario laboral más complejo. Las personas que trabajan en fin de semana dejan sus planes sociales para un lunes. La actitud es definitiva para alcanzar el éxito.

La queja invita a la autocompasión y a la pena. Sin embargo, la iniciativa y la valentía son las claves que te llevarán a poder encontrar oportunidades, incluso, en las circunstancias más adversas. En un proceso de búsqueda de empleo debes centrarte únicamente en tu objetivo: encontrar trabajo.

Una meta que es positiva y que es incompatible con la queja que te lleva a considerarte víctima de una situación injusta. De hecho, la queja te paraliza, por el contrario, la esperanza te pone en movimiento y te centra en la acción. Algunas personas se quejan, sencillamente, porque eso es lo más cómodo. Sin embargo, lo verdaderamente inteligente es vivir con la mejor actitud para ser feliz.

Es imposible vivir ajeno al dinero en la sociedad actual. Sin embargo, hay valores mucho más elevados que están vinculados con el triunfo. En primer lugar, es esencial descubrir la vocación. Es decir, ir a la universidad para estudiar la carrera que uno quiere más allá de las supuestas salidas laborales que tenga dicha licenciatura.

Siempre existen más opciones de triunfar en aquello que a uno le gusta. Porque al final, como explica Victor Frankl, el trabajo también está bañado por el amor. Un amor basado en la creatividad y en esa motivación que mueve tu corazón. Es bueno tener sueños laborales para seguir creciendo.

Existe también la motivación de tener un empleo digno con el que poder sacar a la familia adelante. Este es el motor de muchos padres y madres con hijos. Pero también, es una suerte poder trabajar en una empresa con un buen ambiente de trabajo. Un punto que a nivel de bienestar es mucho más importante que el sueldo. Y es que, al final, el trabajo también es salud. Y si no que se lo pregunten a aquellos que viven en medio del estrés y la ansiedad.

Además, también existe la motivación que surge de uno mismo, de seguir apostando por la formación, estudiando y aprendiendo sin fin. Por otro lado, en plena crisis existe una motivación que muchas personas han perdido. Y es que, cualquier trabajador debería sentirse afortunado por el simple hecho de tener una ocasión positiva.

Entre otras cosas, porque muchos trabajadores tienen un excelente currículum, o sea, un alto nivel de formación, mucho esfuerzo a sus espaldas y por tanto, un trabajo con un sueldo digno se convierte en el premio a esa apuesta de conocimiento que sea realiza en la universidad.

Pero además, las personas tienen derechos, y por tanto, tienen dignidad. Por ello, puede que en algún momento te hayas encontrado con alguna propuesta de empleo realmente insultante e indignante. En ese caso, más allá de la necesidad real que se tenga de un trabajo, es mejor no aceptarlo.

Sencillamente, porque un trabajo que instrumentaliza a la persona termina destruyendo la autoestima, el bienestar interior, la felicidad, y además, también termina robando tanta energía que el trabajador termina atrapado en un empleo del que no puede salir. Sin duda, el sueldo es importante porque se necesita un nivel de ingresos para poder hacer frente a los gastos de vivienda, alimentación, ropa, ocio, formación…

Y la verdad es que hoy día, algunos sueldos son tan sumamente bajos que por ello, muchos jóvenes de más de treinta años siguen viviendo con sus padres ante la imposibilidad de comprarse una vivienda. Sin duda, el sueldo es importante, pero cada persona debe vivir también con una visión realista, es decir, en base a sus posibilidades. A la hora de tener un buen trabajo conviene hacer balance y valorar si aunque no ganes tanto dinero como te gustaría, por lo menos, te permite realizar aquello que de verdad te gusta.

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