El tiempo es uno de los recursos de vida más importantes. Una de las cosas que cambia en la vida de un emprendedor es su agenda. ¿En qué propósitos deberías invertir tus horas a partir de ahora? En Empresariados te damos cuatro ideas.
Formación
El aprendizaje es una preparación que a modo de capacitación incrementa tus recursos para gestionar las dificultades y situaciones del día a día del negocio. La formación continua es un reto libremente asumido por aquellos emprendedores que son conscientes de que esta preparación es fundamental en un entorno tan cambiante.
Networking
Hacer contactos de trabajo es una misión de inteligencia emocional puesto que las alianzas del networking son una fórmula eficaz para reducir la sensación de soledad que produce el individualismo. Sin embargo, solo es posible mantener los contactos por medio del cuidado de los mismos.
Negocio
Tu equipo es un motor importante del negocio, sin embargo, nadie puede vivir del mismo modo que tú esta idea que has creado desde cero y que la has visualizado en tu mente incluso antes de haberla visto crecer. Por tanto, no solo puedes invertir dinero en tu negocio, también puedes invertir tu tiempo como una materia prima de calidad.
Creación de equipo
Un equipo no nace sino que se hace. ¿Y cómo se construye? A través de la inversión de tiempo en el afianzamiento de esa identidad común que implica a todos los protagonistas del sistema corporativo.
Descanso
Conviene encontrar el equilibrio en la dedicación hacia el cuidado del negocio porque uno de los riesgos es olvidarte incluso de ti mismo hasta posponer constantemente tu descanso. Pero no por caer en el síndrome de la ocupación continua vas a ser más productivo. Este descanso comienza, por ejemplo, por la desconexión tecnológica durante el tiempo libre.
Por tanto, el bien es un tiempo importante que conviene repartirlo en distintas metas.