Dudar forma parte del propio proceso de emprender un proyecto, ya que el miedo pone el acento en la incertidumbre de aquello que puede ocurrir a nivel potencial. Sin embargo, resolver una duda no implica minimizar la existencia de una pregunta, sino aceptar que esta visión forma parte del aprendizaje. No todos los interrogantes tienen el mismo efecto en el emprendedor. Un diálogo interior centrado en el discurso de la duda puede llegar a paralizar incluso la iniciativa más prometedora. ¿Cómo superar la duda ante el reto de emprender?
1. Habla con otros emprendedores sobre las dudas al amprender
Tu historia es única, pero también lo es el testimonio de quienes ya han atravesado la fase en la que tú te encuentras. Conocer los obstáculos, los puntos de vista, las fortalezas y los miedos de esos profesionales, te dará una perspectiva más amplia de tu propia experiencia. Cada historia es única pero es probable que encuentres coincidencias con tu propia vivencia.
2. Identifica otras alternativas al emprendimiento
Abrir un negocio no es el único camino profesional que puede iniciar una persona en algún momento de su vida. Existen otras opciones de desarrollo profesional. Enumera distintas alternativas ya que, tal vez, puedas visualizar con más claridad cuál es tu opción preferida cuando pones en perspectiva estas posibilidades.
Contextualiza las dudas
Tener una cuestión sin resolver sobre el emprendimiento no significa poner en duda tu capacidad para emprender o el potencial de este proyecto. Analiza el asunto de forma externa, concrétalo en la realidad al poner nombre a aquel asunto que te produce más inseguridad. No alimentes las dudas hasta el infinito, concéntrate en la solución de aquellos límites.
¿Cómo superar la duda ante el reto de emprender? Estos consejos para avanzar en la dirección de este proceso proactivo conducen al objetivo de incrementar la autoconfianza.