El verano es una época del año en la que el viaje adquiere un mayor protagonismo a nivel turístico. Sin embargo, la vivencia del viaje puede trasladar este componente estacional estival para disfrutarse en cualquier periodo del año. ¿Qué beneficios producen los viajes en los emprendedores?
Ideas de negocio
El conocimiento de otras realidades que pueden guardar semejanzas con la zona de confort conocida pero que también presentan diferencias ofrece a la mente creativa la referencia de una inspiración que puede dar lugar a la imagen de un emprendimiento. La persona puede tener acceso a esta realidad mediante el testimonio de otros conocidos o mediante la lectura de fuentes de información, pero un viaje alimenta la observación en quien se convierte en protagonista de ese lugar durante unos días.
Cambio de perspectiva
El recurso de la creatividad puede multiplicarse con solo cambiar el planteamiento habitual a partir de una nueva posición en el mapa. El ejemplo del viaje describe un movimiento que trasciende a aquel desplazamiento que se mide en kilómetros y expresa un cambio interno. Además, los viajes también pueden ayudarte a poner en práctica la iniciativa del propio emprendimiento. Un mismo asunto puede tener una interpretación diferente a partir del punto del encuentro con una situación nueva.
Aprendizaje práctico
El aprendizaje no solo está en las aulas cuando un estudiante pasa tanto tiempo de su vida académica inmerso en nuevos objetivos. El aprendizaje es inherente a la propia escuela de la vida. Y el viaje ofrece numerosas lecciones en relación con la planificación, la gestión del tiempo, el control del presupuesto, la búsqueda de soluciones ante imprevistos, la toma de decisiones de presente, el networking… Por todo ello, al volver de un viaje también regresas con nuevas lecciones que conectan con la esencia práctica de la propia vida.