La formación es una base muy importante para emprender un negocio, pero un emprendedor también puede cometer errores desde este plano. En Empresariados enumeramos algunos ejemplos de circunstancias posibles.
1. Siempre en la búsqueda de un nuevo título
La formación aporta una preparación, pero la autoconfianza necesaria para emprender no depende solamente de esta base. De hecho, puede darse el ejemplo de quien a pesar de tener distintos títulos, siempre siente que no se encuentra todavía en el momento indicado para emprender. La formación continua es una propuesta de valor a largo plazo, pero también es muy importante recordar el significado de los logros alcanzados hasta el momento.
2. Ausencia de formación en inteligencia emocional
Un emprendedor llevará a cabo un proyecto que debe gestionar en sus distintos apartados. Un error habitual es dar prioridad a cuestiones concretas del negocio, dejando en un segundo plano la inteligencia emocional que es tan vital en las relaciones personales con el equipo de trabajo, en la toma de decisiones, en la gestión del estrés y en la preparación para el éxito.
Estos talleres de inteligencia emocional para emprendedores no solo son teóricos, también son prácticos.
3. Dejar un curso sin terminar
Las obligaciones del emprendedor ocupan buena parte de su tiempo y en medio de una agenda difícil es posible que el protagonista inicie un curso sin llevarlo a término. Cuando este hecho se repite de manera habitual, pierde importantes oportunidades de aprendizaje en el camino.
4. No tener en cuenta todos los recursos
Un emprendedor puede formarse con distintas herramientas a su alcance. Pero un posible error es no aprovechar todas las posibilidades que tiene a su disposición. Una de las tendencias actuales es la de los cursos MOOC abiertos y en línea. El aprendizaje también puede tener un tono autodidacta a través de la lectura.