Muchos autónomos y pequeños negocios afrontan grandes obstáculos en el ejercicio de su actividad. En Empresariados explicamos cuáles son algunos de los desafíos que se contextualizan en la situación actual.
1. Dificultades para llegar a final de mes
A veces, esta dificultad se manifiesta como una constante en el calendario. En otros casos, irrumpe en periodos específicos del año en los que se produce una caída en las ventas y beneficios. Sin embargo, es difícil establecer objetivos de futuro cuando el día a día de la vida profesional se convierte en una lucha permanente para salvar las dificultades y encontrar nuevas oportunidades.
2. Dificultad para destacar ante la competencia
Autónomos y pequeños negocios desarrollan su actividad en un sector en el que hay otros competidores que también quieren crecer y evolucionar. Pues bien, la dificultad para destacar ante la competencia existente en un contexto específico es una realidad que, en ocasiones, deriva en el cierre de un proyecto que resulta totalmente inviable a largo plazo.
3. Ingresos mensuales que varían de forma notable (mientras los gastos se mantienen)
Muchas de las dificultades que afrontan cada día los autónomos y pequeños negocios se enmarcan en el ámbito financiero y económico. Por ejemplo, la planificación del futuro es clave para incrementar la resiliencia a largo plazo cuando se producen variaciones significativas en los ingresos mensuales. Si los meses en los que se produce una mayor actividad compensan la balanza final a lo largo del año, entonces, el proyecto puede ser viable. Sin embargo, no es fácil hacer frente a aquellos meses en los que, a pesar de que los ingresos mensuales bajan, los gastos principales se mantienen.
4. Exceso de burocracia en trámites y gestiones
Autónomos y emprendedores que gestionan pequeños negocios deben hacer frente a una amplia lista de tareas y responsabilidades. Pues bien, hay procesos que no son fáciles de completar como muestra la complejidad de aquellos trámites que pueden llegar a desbordar a quien debe ocuparse de gestiones que requieren de tiempo, atención y dedicación. Por ejemplo, autónomos y pequeños negocios deben estar muy atentos a las fechas clave del calendario fiscal para cumplir con los plazos marcados.
4. Estrategia de diferenciación por precio
El precio tiene un peso importante en el éxito y viabilidad de un proyecto. Sin embargo, cuando un autónomo o el emprendedor de un pequeño negocio establece las tarifas y precios de los servicios que ofrece, se sitúa en un contexto en el que, más allá de su propia forma de diferenciación, existe una guerra de precios para brillar frente a la competencia y atraer a los clientes.
5. Estrés laboral en autónomos y pequeños emprendedores
El estrés laboral impacta en autónomos y emprendedores que gestionan pequeños negocios. En ocasiones, los síntomas de estrés son la consecuencia directa de la sobrecarga de trabajo. Sin embargo, la situación también puede agravarse cuando se suman otros factores adversos como la dificultad para coger vacaciones y descansar durante un tiempo. Para autónomos y emprendedores es muy difícil desconectar plenamente de sus responsabilidades durante varios días. Es habitual que se ocupen de tareas y gestiones incluso cuando se encuentran en un viaje de vacaciones. Cuando el estrés afecta a los empleados de un negocio, puede convertirse en un factor de riesgo que incrementa el nivel de rotación en el equipo.
Por tanto, hemos iniciado el artículo haciendo referencia a las dificultades de muchos autónomos y pequeños negocios para llegar a final de mes. Pues bien, el factor económico también está en conexión con el plano emocional. La incertidumbre ante el futuro a corto y medio plazo intensifica la preocupación, la tensión, el estrés y el malestar.