Cada emprendedor necesita encontrar la fórmula de emprendimiento que mejor se adapta a su idea, su situación profesional y su capacidad de inversión. La franquicia ha conseguido una gran proyección en las ciudades. Y despierta el interés de diferentes perfiles, entre ellos, jóvenes emprendedores. ¿Qué ventajas aportan las franquicias a quienes desean montar un negocio sin contar con una gran experiencia previa?
1. Formación y aprendizaje
Cualquier persona, más allá de su edad, puede sentir el peso de las dudas o la incertidumbre al impulsar un proyecto profesional. La formación y el aprendizaje ofrecen una mejor preparación para afrontar un desafío tan exigente. Pues bien, el emprendimiento en franquicia aporta recursos y herramientas que alimentan el conocimiento, el desarrollo de habilidades y la capacidad de liderazgo.
2. Soporte y sentido de pertenencia: reducción del riesgo
Es esencial que un emprendedor no se deje llevar por las expectativas inalcanzables cuando estudia el potencial de su idea de negocio. El éxito, la rentabilidad y el beneficio pueden materializarse en el futuro.
Pero el primer paso no garantiza que el proyecto se posicione definitivamente en el mercado. Sin embargo, cuando un joven emprendedor abre las puertas de su negocio a través de una franquicia, está respaldado por el soporte, la estructura y la solidez del sistema del que forma parte. Es decir, el nombre y el logo de la franquicia crean las condiciones favorables para realzar la visibilidad en un proyecto que comienza.
3. Visión de futuro
El ámbito del emprendimiento es muy complejo si tenemos en cuenta que, un elevado porcentaje de los negocios que abren sus puertas, no alcanza los cinco años de vida. Un joven emprendedor tiene la posibilidad de crecer y evolucionar con la idea de negocio que ha impulsado. Pues bien, la propia estructura de la franquicia da voz a esta posibilidad a través del testimonio de aquellos emprendedores que han conseguido objetivos relevantes en colaboración con el nombre al que están vinculados.
4. Una imagen reconocible
Un emprendedor invierte en marketing para mostrar una propuesta de calidad ante el público objetivo. Se produce un punto de inflexión muy positivo en el instante en el que un cliente potencial reconoce perfectamente el logo o el nombre de la entidad. Es decir, los aspectos que identifican el proyecto alcanzan un buen nivel de proyección.
Pues bien, la franquicia está respaldada por el posicionamiento de una marca que transmite confianza. Los distintos establecimientos que están vinculados a la franquicia tienen una imagen unificada en sus características principales.
5. Un modelo de negocio que funciona
Como hemos comentado, cada joven emprendedor busca el camino que se ajusta a sus necesidades, expectativas de futuro y objetivos. Una franquicia ofrece un modelo de negocio que funciona y está respaldado por datos objetivos.
Por esta razón, muchos profesionales eligen esta alternativa cuando se marcan un plazo para dar el paso definitivo de emprender. Generalmente, la incertidumbre nunca desaparece completamente. Pero un modelo de negocio que funciona aporta una mayor estabilidad, incluso, en momentos complejos.
6. Trabajo en grupo
Cuando un emprendedor decide montar un proyecto a través de una franquicia se convierte en su propio jefe. Es decir, es el responsable de la iniciativa que ha impulsado y asume el reto de liderar el proceso. A veces, nace el sentimiento de soledad en el emprendimiento. Sin embargo, la franquicia potencia la visión de la colaboración por medio del trabajo en equipo.
Las franquicias ofrecen muchas ventajas a los jóvenes emprendedores que dan el paso de emprender a través de un sistema que está respaldado por resultados objetivos.