La labor de un emprendedor es un reflejo de su motivación interna y su proactividad. Es decir, trabaja constantemente para lograr objetivos que determinan cuáles son los próximos pasos del plan de acción. Sin embargo, el estilo de vida del emprendedor puede seguir girando alrededor del proyecto, incluso, en su tiempo libre. Así sucede cuando no se permite desconectar en ningún momento y sigue pendiente de cualquier novedad. Pues bien, es importante encontrar instantes de desconexión para descansar plenamente de la ocupación, las responsabilidades y la toma de decisiones. En Empresariados compartimos seis consejos para desconectar del negocio en tu tiempo libre si eres emprendedor.
1. Reduce las tareas pendientes antes del fin de semana o el inicio de las vacaciones
Planifica tu tiempo de descanso por medio de una organización eficaz. Por ejemplo, no aplaces al lunes una tarea que puedes hacer en viernes. De este modo, reduces el peso que producen esas variables pendientes que se acumulan en la agenda (y que dejan un efecto en el ánimo).
2. No dejes que tu negocio llene todas las esferas de tu vida
Tu negocio requiere de tu implicación, dedicación y compromiso. Pero es esencial encontrar un equilibrio para que tu existencia no gire de forma permanente en torno a cuestiones relacionadas con las finanzas, las ventas, el trabajo en equipo y otras gestiones. Es decir, otras esferas de tu vida también requieren de tu participación directa. En definitiva, potencia tu desarrollo personal en tu tiempo libre, en la familia, en la amistad y en otros campos que nutren la felicidad. ¿En qué ámbito te gustaría estar más presente en esta etapa?
3. Confía y delega: no eres imprescindible
Eres el alma de tu negocio. Pero tu talento y tu capacidad de gestión crecen cuando delegas algunos aspectos en personas cualificadas y preparadas. La imposibilidad para desconectar del trabajo, en ocasiones, está en relación con una sobrecarga constante de tareas. Tal vez ha llegado un momento en el que ya no puedes ocuparte de todo en soledad por mucho que lo intentes. Por tanto, aprender a delegar también es una expresión de humildad por parte de quien acepta sus propios límites.
4. Desconexión digital
El reto de la desconexión resulta especialmente complejo en un contexto tecnológico. Puedes estar en un lugar determinado y tener tu atención en el proyecto. Por esta razón, conviene marcar una distancia de forma intencional para desconectar de los asuntos del trabajo. Es decir, es recomendable apagar el teléfono móvil en horarios establecidos de forma consciente.
5. Haz actividades que te gustan: para descansar y mejorar tu creatividad
Si no desconectas de tus responsabilidades durante el tiempo libre, te incorporas al trabajo con la sensación de no haber descansado plenamente. Por el contrario, cuando disfrutas de tu descanso y haces planes que te gustan, también alimentas la creatividad, el bienestar y la libertad interior.
6. Prioriza tu autocuidado
Tu proyecto es muy importante para ti. En consecuencia, te implicas cada día para desarrollar tu mejor versión. Así como el deber y la responsabilidad tienen su propio espacio, el autocuidado también es esencial. Cuando desconectas del trabajo durante tu tiempo libre estás alimentando tu inteligencia emocional. De hecho, el tiempo libre te ofrece la posibilidad de hacer planes y actividades en los que no puedes poner tu atención cuando estás ocupado.
Sin embargo, si cuando estás fuera del trabajo sigues pensando en los asuntos del negocio, no te permites disfrutar realmente del regalo del presente. ¿Qué crees que te impide desconectar de tus responsabilidades en la actualidad? ¿Y qué vas a hacer para influir positivamente en la situación? Tal vez puedas hacer algunos cambios para planificar y organizar tu agenda de forma más eficiente.