La situación geográfica de un local comercial es parte del proceso del éxito de un negocio próspero. Por ello, cualquier emprendedor tiene que dedicar un tiempo a elegir el lugar ideal atendiendo a varios criterios.
Estar cerca de la competencia
En muchos casos, y aunque parezca contradictorio, estar cerca de la competencia es bueno para facilitar al cliente que haga sus compras con comodidad en una zona concreta. Por ejemplo, al abrir una tienda de ropa analiza cuál es la zona comercial de tu ciudad en la que están posicionadas otras tiendas de la competencia. Lo mismo sucede en el caso de abrir un bar o un restaurante. En algunos casos, contar con comercios que sean muy conocidos cerca puede ser una buen indicio a la hora de elegir la zona.
Zonas de acceso al lugar
Para valorar si un lugar es bueno para un negocio también es importante comprobar las opciones de acceso que tienen los clientes. Por una parte, valora si existe una buena comunicación mediante transporte urbano hasta el lugar ya que son muchos los ciudadanos que lo utilizan. Además, pensando en aquellos que prefieren viajar con su propio vehículo también tienes que valorar si cuentas con una buena zona para aparcar o existen parkings cerca. Valora en qué medida el éxito de tu negocio depende de tu posición. Para elegir un buen lugar comercial, en primer lugar, tienes que definir cuál es tu público objetivo.
Los conocidos como generadores de tráfico ya sean centros comerciales o calles transitadas son aquellos lugares que cuentan con negocios con mucha vida. La esquina de una calle comercial es uno de los lugares más anhelados por muchos empresarios.
Alquilar mejor que comprar
Para minimizar el riesgo que siempre se asume al ser emprendedor es mejor optar por la vía del alquiler antes que por la opción de compra. Alquilar un negocio te permite la posibilidad de conocer mejor cómo es ese sector antes de dar el paso de comprar un local comercial.