Uno de los negocios que goza de mayor demanda es el supermercado o tienda de autoservicio. Aunque en las grandes ciudades tienen mucha presencia de los centros comerciales, estos no han hecho sombra a las tiendas de barrio puesto que existe un amplio público objetivo que todavía prefiere la comodidad de hacer la compra en el entorno cercano a casa. Una de las claves del éxito de un supermercado es dar protagonismo a los productos frescos y de temporada, elementos clave para una dieta sana.
Ideas para montar una tienda de autoservicio
Tanto el centro de la ciudad como entornos residenciales son propicios para montar un negocio de estas características. Muchos emprendedores que emprenden en este sector deciden hacerlo bajo la colaboración con una franquicia. Para emprender en este ámbito no es necesario tener una formación específica pero sí es muy aconsejable tener experiencia previa de trabajo en el sector.
Son muchos los elementos que puedes tener en cuenta para crear el entorno ideal de un supermercado: cajas registradoras, cámaras de frío, vitrinas de exposición, cortadoras de fiambre y carne, cestas y carros para los clientes, zona para los lácteos…
Dentro del personal necesario para trabajar en un supermercado es muy importante la labor del personal en caja, personal de limpieza y repartidores.
Cómo elegir una franquicia de supermercado
Existen distintos factores que puedes valorar al elegir una franquicia de supermercado. Y uno de estos criterios es la marca puesto que este punto es el que más valoran los clientes como sinónimo de confianza. En relación con el punto anterior, el precio es otro elemento clave. Además, es posible considerar el horario que debe cumplir el franquiciado en el negocio, cuál es la dinámica de promociones en el local y si existe la posibilidad de comprar productos a otros proveedores.
Uno de los inconvenientes de este tipo de iniciativa es que existe una gran competencia pero además, es difícil ser innovador.