Tu página web debe ofrecer toda la información que te gustaría que supiera el cliente, sin tener que consultar más datos. Por esta razón, en primer lugar, debes determinar qué información profesional quieres comunicar. Selecciona aquellos datos que destacarías en una carta de presentación. Además, también puedes compartir un portafolio de proyectos publicados.
Cómo tener una página web de calidad
Una página web es un canal de diálogo, por esta razón, el lector también debe sentirse una parte importante de este espacio. Por ejemplo, es muy positivo facilitar distintas formas de contacto. Una buena fórmula para ofrecer un valor añadido al visitante es conectar un blog con dicha página. Cuanto más especializada sea tu página, mejor vas a conocer al público objetivo. Por tanto, tienes más posibilidades de ofrecer aquello que realmente necesitan los lectores.
La página web muestra el perfecto equilibrio en forma y contenido de la suma de texto, imágenes y vídeos. Es decir, una página web no solo tiene valor informativo, sino también, visual. Si se trata de la página web de un negocio local, es muy importante integrar datos de geolocalización para estar mejor posicionado. Si ofreces productos específicos a través de tu página, por ejemplo, cursos, puedes ofrecer promociones específicas.
Una de las ventajas de tener una página web es que incrementas el marketing ya que otros clientes pueden ponerse en contacto contigo directamente a través de este canal de marketing personal.
Velocidad de carga de la página
Para incrementar una experiencia agradable de visita de los usuarios, ten en cuenta el tiempo de velocidad de carga en la página. Aquellas páginas que son lentas suponen una desventaja importante. Pero esta velocidad de carga debe considerarse desde la visita de distintos dispositivos móviles. Además, también es muy importante actualizar la página con el paso del tiempo, pudiendo añadir nuevas secciones, por ejemplo.