En la actualidad, son muchas las empresas que tienen visibilidad en internet gracias a una página web. Un error habitual es el de tener una página web sin actualizar que produce una sensación de caducidad inmediata. Contratar un redactor freelance es una buena idea para contar con un profesional que genere contenido adecuado para la web.
Cuando el trabajo no es constante
Es más económico contratar a un redactor freelance que tener un escritor en plantilla puesto que el trabajo puede ser variable a lo largo del año. De esta forma, las empresas solicitan la cantidad de artículos requeridos en cada época del año.
Un redactor freelance investiga previamente sobre un tema para publicar un artículo en concreto por lo que genera contenidos adecuados para la temática de la web.
Al tener una página web actualizada también es más fácil generar fidelidad en los lectores que se pueden convertir en potenciales clientes. En algunos casos, la empresa puede dar los títulos de los artículos al redactor freelance para que éste escriba sobre esa temática en concreto. También existe la posibilidad de que el redactor realice entrevistas a profesionales del sector para publicar en la web.
Cómo seleccionar un redactor freelance
Un profesional puede escribir muy bien pero no ser el mejor candidato para esa empresa si no es especialista en la temática. Para comprobar su experiencia, además del currículum es importante contar con muestras de trabajos publicados en ese tema. Contratar a un redactor freelance para actualizar la página web también supone un ahorro de tiempo importante para la empresa que delega en manos del profesional adecuado la generación de contenidos.
Actualizar la página web con regularidad gracias a un blog de empresa también es positivo para posicionar mejor la página web en google y poder atraer a nuevos clientes.