¿De dónde surge el miedo al fracaso? Muchas personas no intentan un proyecto porque prefieren quedarse en la comodidad de lo conocido que afrontar el posible fracaso que surge del inicio de una acción. Sin embargo, aquel que no intenta un proyecto profesional no fracasa, sin embargo, tampoco triunfa.
Se queda estancado, no mejora, no crece, por tanto, vive a medias. ¿De dónde surge el temor al fracaso? Sin duda, en parte, nace del vínculo que algunas personas establecen entre éxito y valía personal. Es decir, algunos trabajadores asocian momentos de desempleo o de menos suerte en el ámbito laboral con el hecho de no ser lo suficientemente, aptos. ¿Cómo poder ir más allá de este modo de pensar?
Asumiendo que ningún ser humano se reduce a sus circunstancias, sencillamente, porque el ser está por encima del tener. Es decir, tu identidad es la misma más allá del entorno que te rodea y tu valor es exactamente el mismo tanto si trabajas como director de una empresa de prestigio como en un momento de despido.
En otras ocasiones, detrás del miedo al fracaso también existe el temor de decepcionar a las personas cercanas. Por ejemplo, a los padres o a la pareja. Debes vivir con la idea de que aquellos que te quieren te acompañarán en los buenos momentos y también, en esos instantes en los que los resultados no son los deseados. El miedo se alimenta a base de escucharlo, por ello, una vez que una persona da el primer paso, descubre que se siente mucho más fuerte y más segura de sí misma.
El miedo al fracaso también puede surgir de una experiencia negativa del pasado. Sin embargo, en ese caso, se debe poner en contexto lo sucedido para que un hecho del ayer no limite tu modo de vivir hoy.
El valor de una persona es en verdad invariable, es el que es. Pero hay que se realistas. ¡Que difícil es olvidarse o no considerar la opinión que los demás tienen de ti!
sean fuertes XD