Para ser emprendedor y no morir en el intento, hay que tener muchas cosas bajo control. Una de ellas es el despacho en el que se llevarán a cabo las tareas del día a día, ya que es importante que esté lo suficientemente bien condicionado como para poder ser productivo.
En este artículo vamos a hablarte de todo aquello que no debería faltar en un despacho que aspira a ser de lo más completo y útil. ¿Te apetece saber más?
Material imprescindible
Para el desempeño de las funciones que se realizan en un despacho, hay que contar con el material que permite cumplirlas de forma satisfactoria. Eso implica tener a mano material de oficina como lápices, bolígrafos, plumas o rotuladores, además de un lapicero para organizarlos. También son muy útiles los post-it o blocs de notas adhesivas, lo mismo que se puede decir de los archivadores y las carpetas.
Si tienes que enviar algo, debes saber que los sobres de burbujas son una muy buena opción cuando se trata de productos pequeños y frágiles, ya que nos aseguramos de que lleguen en perfectas condiciones. También puedes utilizar cajas postales y cajas más grandes con solapas si lo que tienes que enviar es más voluminoso.
Un silla cómoda
Tenerlo todo a mano es tan importante como sentirse cómodo en el despacho. Una silla ergonómica, capaz de adaptarse a tu cuerpo, te ayudará a pasar toda una jornada laboral sentado sin que eso sea un problema. Eso sí, trata de levantarte de vez en cuando para estirar las piernas y despejarte, ya que pasar mucho tiempo frente a un ordenador no es muy bueno ni para la circulación de la sangre ni para la vista.
En el mercado encontrarás distintas opciones. No solo debes fijarte en la estética, que lógicamente también es importante, sino que debes dar mucha importancia a la comodidad, eligiendo un modelo de silla con respaldo tanto para la espalda como para la cabeza, ya que de esta forma evitarás que tus cervicales sufran.
Escritorio y espacio de almacenamiento
El escritorio debe ser lo suficientemente grande como para tener todo lo imprescindible siempre a mano. No hay que cogerlo más grande de lo necesario porque eso hará que el espacio del despacho no se aproveche tan bien, pero tampoco hay que quedarse corto porque serás más productivo si lo tienes todo a al alcance de tu mano.
Otro aspecto importante que tiene que ver con el mobiliario es el del almacenamiento. En un despacho se acumulan muchos papeles y objetos que con el tiempo hay que decidir si son lo suficientemente importantes como para mantenerlos. Sea como sea, es recomendable contar con una cajonera cerca para tener todos esos papeles a mano y ordenados. Además, te pueden venir muy bien las estanterías y las baldas para ganar almacenamiento. En ellas no solo colocarás documentación de la empresa, sino que también puedes permitirte el lujo de colocar elementos decorativos para que el despacho tenga personalidad. Sentirse a gusto en el puesto de trabajo es muy importante.