En plena crisis económica, existe un clima de incertidumbre que ha mermado la calidad de vida de muchos trabajadores. El síndrome del superviviente es una patología a nivel emocional que viven algunas personas que forman parte de empresas que han sufrido un reajuste importante. El superviviente se siente contento por mantener su puesto de trabajo pero a la vez, se siente triste y culpable por aquellos empleados que lo han perdido.
Además, los supervivientes se ven forzados en más de una ocasión, a asumir más responsabilidades llegando a tener que desempeñar funciones de sus antiguos compañeros. Esta situación produce estrés añadido, cansancio, apatía y mucha incertidumbre. Ya que a pesar de mantener el puesto de trabajo, esta situación se observa desde un punto de vista temporal en tanto que la situación de la empresa no es buena. El síndrome del supervivente se agrava en muchos casos por la falta de información y de transparencia que existe en muchas empresas.
Mantener el puesto de trabajo
Existen supervivientes que en medio de la dificultad de salir a flote en una situación adversa, han hecho tal desgaste para mantenerse en ese punto que se sienten sin fuerzas para buscar otro empleo. De esta forma, se produce el círculo vicioso de estar en una situación negativa y de permanecer en ella al no hacer algo para salir de ese agujero.
Cómo salir de esta situación
Las personas que están en una empresa con un clima laboral adverso tienen que agarrarse todavía más al presente. El futuro tiene que ser un estímulo para buscar otras alternativas y ser previsor. Es decir, conviene hacer una buena planificación para buscar otro trabajo.
No te tomes la situación como algo personal. Existen supervivientes que sienten que tienen que justificarse ante aquellas personas que han sido despedidas.