Cada sector es importante en la sociedad y el turismo produce una importante huella no solo en la economía, sino también en la vida de las personas. Un viaje está vinculado a una historia de vida. Un relato en el que el protagonista experimenta emociones agradables y felicidad. Por tanto, el sector turístico pone en valor un concepto tan esencial para el ser humano como la felicidad.
1. La vinculación entre el turismo y la cultura
El turismo, a su vez, está directamente relacionado con la cultura. A través del conocimiento de un nuevo lugar, cada visitante adquiere una visión del mismo. Una visión que parte de la observación integral de un entorno con tradiciones, historia, monumentos, parques, restaurantes, hoteles, museos…
La cultura es un alimento que potencia el crecimiento personal del ser humano. Por ello, la vinculación del turismo con este ingrediente también pone de manifiesto el valor que tiene el conocimiento. El turismo cultural es un ejemplo de ello.
2. Puestos de empleo
El sector del turismo ofrece numerosos puestos de empleo en negocios e iniciativas que dan vida a las calles de pueblos y ciudades. Un sector que inspira múltiples ideas de negocio. Por ejemplo, muchos emprendedores gestionan tiendas que venden artículos de recuerdos que los visitantes se llevan a casa en la maleta tras su paso por un destino. Esta actividad también ofrece empleo estacional durante ciclos concretos del año como el verano o la Navidad.
El emprendimiento también puede tener un carácter estacional como muestra el ejemplo de aquellos negocios que giran en torno a una idea estival. Son muchas las temáticas que adquieren una vinculación directa con el turismo: la gastronomía, el transporte, las tiendas de moda, las librerías, las agencias de viajes…
3. Propuesta de valor de cada destino
Cada destino de viaje posee su belleza. Y la atención a esta esencia única propicia la comunicación de la propuesta de valor de un lugar.
El sector turístico es muy importante en la sociedad y, actualmente, experimenta un periodo de vulnerabilidad marcado por la incertidumbre de futuro.