La falta de descanso de las personas puede influir en diferentes facetas de su vida personal, pero también de la laboral, ya que no dormir las horas necesarias guarda una relación directa con el aumento de la conflictividad laboral, pero también con el incremento de los accidentes laborales y de tráfico y de la salud de la propia persona.
Esta relación se ha puesto de manifiesto en un estudio realizado por la Fundación MAZ de Prevención y Medicina, en el que igualmente se ha constatado que en general los trabajadores no duermen el tiempo suficiente para desempeñar una jornada laboral en óptimas condiciones.
De hecho, según los datos del estudio, cuatro de cada diez trabajadores duerme menos de siete horas diarias e, incluso, el 10% duerme menos de seis horas diarias que son consideradas como insuficientes por diversos estudios científicos para que una persona pueda desarrollar su trabajo en óptimas condiciones.
Otros datos de interés de este estudio son que, además, el 29% de los trabajadores tarda más de media hora en conciliar el sueño, lo que puede ser un indicio de insomnio, y el 30% asegura que se despierta durante la noche, mientras que un 31% reconoce que se despierta esporádicamente. Unos trastornos que pueden llegar a derivar en accidentes laborales y de tráfico puesto que el organismo no descansa lo suficiente y no tiene un sueño reparador para afrontar una nueva jornada laboral en las condiciones más adecuadas.
Y es que precisamente también el 60% reconoce que no tienen un descanso reparador o que sólo duerme plenamente en algunas ocasiones, una falta de descanso que se deja notar en el sentido del humor y en el estado de ánimo, contribuyendo a aumentar la irritabilidad y el decaimiento que, a su vez, redundan en conflictos entre compañeros de trabajo y en la creación de un clima laboral que no es beneficioso.