Dudar es un acto que acompaña a decisiones importantes, por ejemplo, el emprendimiento. ¿Cuáles son las dudas más habituales de quienes emprenden un negocio?
Cuándo es el momento adecuado
Esta duda lleva a posponer hasta un hipotético escenario ideal esa meta de emprender una idea de negocio. La persona tiene su plan teórico, sin embargo, siempre existe un “pero” que, en la práctica, se convierte en un obstáculo aparente.
Emprender solo o con un socio
La responsabilidad de emprender puede abrumar tanto a una persona joven o sin experiencia que es muy posible que se haga esta pregunta porque, en este caso, la idea de colaborar con un compañero también puede estar vinculada con el temor a asumir esa responsabilidad de manera individual.
Elección del nicho
Como ocurre con la elección de una carrera universitaria, un emprendedor no solo valora su propia vocación, además, también valora qué sectores ofrecen mejores salidas laborales en términos de productividad y ventas.
Preparación
La duda sobre la falta de preparación es una constante incluso en los perfiles mejor preparados con un currículum más completo. Un emprendedor sin experiencia también puede bloquear su potencial por esta cuestión que le hace desconfiar de su propia resiliencia para encontrar las mejores soluciones ante cada situación.
Ubicación
Cuando se trata de un negocio físico, la ubicación del lugar se convierte en un factor esencial del éxito. El mapa comercial ofrece distintas posibilidades de localización. Y, en torno a esta cuestión, el emprendedor también puede tener dudas sobre cuál es el punto más adecuado para la vida de ese comercio.
El futuro
Todas esas decisiones de presente se toman desde la base de unas expectativas. ¿Y qué ocurre si el porvenir del negocio está marcado por el fracaso? El futuro como incógnita se transforma en duda que bloquea a la persona.