La elección de la ubicación ideal se convierte en un factor decisivo para potenciar la visibilidad de un proyecto. Los negocios que se encuentran en el centro de la ciudad disfrutan de una posición destacada. Las calles que se sitúan en el entorno son muy valoradas desde el punto de vista comercial. Pero dicha ubicación no solo ofrece ventajas, visibilidad y oportunidades. También conviene analizar qué inconvenientes plantea.
Ventajas de los negocios situados en el centro de las ciudades
En primer lugar, las calles del centro tienen mucha vida. Vecinos y residentes realizan diferentes gestiones en la zona. Además, despierta el interés de aquellos turistas que visitan el destino durante unos días y quieren descubrir las calles y edificios más representativos. De este modo, los escaparates tienen una visibilidad especial entre los clientes habituales y los nuevos compradores. Es decir, también es una zona de referencia para las personas que residen en un pueblo próximo y se desplazan a la capital por motivos de trabajo o de ocio.
Por otra parte, la cercanía con otros negocios es positiva para el propio proyecto. Una excelente red de servicios ofrece una amplia variedad de soluciones para los clientes que disfrutan de una óptima experiencia de compra. En el entorno no solo destacan otros establecimientos especializados en la misma temática, sino que la oferta se complementa con diferentes propuestas.
Aporta una agradable sensación de cercanía, incluso en la ciudad, donde las distancias aumentan significativamente. Sin embargo, el centro está perfectamente conectado con diferentes medios de transporte. De este modo, los clientes disponen de la infraestructura deseada para desplazarse a través de varias vías alternativas.
Cualquier celebración adquiere una visibilidad especial en el centro de la ciudad. La temporada navideña es un buen ejemplo de ello: la decoración de las calles se contextualiza, especialmente, en este núcleo. Pero es un aspecto positivo que puede percibirse en cualquier otro tiempo del calendario. El centro no solo es un lugar de compras, sino también un espacio de socialización y encuentro. Y es una ubicación que tiene una relevancia especial desde el punto de vista histórico.
Desventajas de los negocios situados en el centro de las ciudades
El centro de la ciudad es un espacio muy demandado por los emprendedores. Sin embargo, los precios del alquiler o la compra de un local comercial son significativamente más elevados que aquellas cantidades que describen la realidad del emprendimiento que se contextualiza en otros barrios situados cerca del centro. Este hecho hace que el coste final supere el presupuesto de inversión de muchos profesionales que descartan la idea de abrir un punto de venta en dicho entorno.
Se produce una alta competencia de nombres perfectamente reconocibles para el gran público. Muchas de las firmas más importantes están ubicadas en el centro de diferentes ciudades. En definitiva, es un entorno que proporciona muchas oportunidades, pero el reto es exigente cuando se trata de destacar y perdurar. Los locales que cierran sus puertas muestran a través de su ejemplo que una excelente ubicación no es garantía de éxito. Existen otras muchas variables que influyen en la proyección del negocio a largo plazo.
El alto grado de competencia no solo es visible tras la apertura de una tienda. Con anterioridad a ese momento, el emprendedor compite con otros profesionales que están interesados en invertir en ese local que ha llamado su atención. Las tiendas situadas en el centro de la ciudad, como ocurre en cualquier otra ubicación, disfrutan de diferentes ventajas que potencian las ventas. Sin embargo, también afrontan algunos inconvenientes en la etapa inicial del proyecto y en el mantenimiento del mismo.