Una excelente gestión del talento influye positivamente en el desarrollo de un negocio desde un enfoque holístico. Mejora los resultados, eleva la productividad y crea un buen clima de trabajo. Además, fortalece la innovación. Existen diferentes tipos de recursos humanos que muestran las distintas etapas que intervienen en el proceso.
1. Recursos humanos aplicados al ámbito de la formación
Las empresas toman la iniciativa de impulsar medidas esenciales para formar a los empleados. Es importante favorecer el desarrollo profesional de los trabajadores porque esa condición repercute positivamente en el vínculo con la entidad. Además, los negocios afrontan nuevos desafíos, experimentan cambios significativos y deben adaptarse a lo nuevo. Por ello, existen profesionales que trabajan en el sector de los recursos humanos como especialistas en la planificación de itinerarios de formación adaptados a las necesidades de cada puesto.
2. Recursos humanos centrados en el reclutamiento y la selección de personal
La búsqueda de un perfil adaptado a las necesidades de un puesto de empleo se alinea con un proceso estructurado en diferentes etapas. En ese caso, es importante identificar cuáles son las características del cargo, las tareas asociadas al mismo y las competencias que debe reunir el perfil ideal. Es decir, los expertos en recursos humanos realizan un diagnóstico del puesto y presentan esa oportunidad profesional a través de los canales adecuados.
De este modo, contactan con potenciales talentos que pueden estar interesados en enviar su currículum. El inicio del proceso no siempre implica que la estrategia finalice con la contratación de un profesional competente y cualificado. Puede ocurrir que la búsqueda no dé los frutos deseados.
3. Outsourcing de Recursos Humanos
Las grandes empresas cuentan con un departamento especializado que gestiona los temas relacionados con los recursos humanos. En cualquier negocio, más allá del número de empleados, es necesario gestionar el talento. Pues bien, existe una fórmula flexible que posiciona sus ventajas en este sector: la externalización.
Es decir, un proyecto puede delegar una o varias tareas en un equipo especializado con el que establece un vínculo de confianza. De este modo, el responsable del negocio se centra en la actividad principal.
4. Recursos humanos por competencias
Es un tipo de gestión que incrementa el nivel de acierto en la búsqueda del perfil indicado para un puesto. El proceso de selección se completa con un seguimiento continuo que evalúa la evolución del plan de acción. De hecho, la empresa desarrolla un estudio detallado de las características del cargo. Por otra parte, realiza una enumeración de las competencias clave que debe presentar el candidato para desempeñar su labor con la máxima profesionalidad.
Por tanto, los recursos humanos por competencias están respaldados por datos objetivos y contrastados que simplifican las dificultades que surgen en el camino.
5. Recursos humanos centrados en potenciar el bienestar laboral
El talento es importante en el campo de los recursos humanos puesto que es el principal valor de una entidad. Pero no es el único concepto relevante en las empresas felices.
Es importante impulsar la creación de un entorno que favorece el bienestar laboral. Actualmente, las entidades también valoran la posibilidad de impulsar programas especializados para incrementar el salario emocional de los trabajadores por medio de acciones que influyen positivamente en su cuidado. Un programa de bienestar laboral es esencial para reducir el estrés en el entorno corporativo.
Una empresa grande o pequeña está integrada por personas. Por ello, los trabajadores representan los recursos humanos de una entidad. La implicación y el compromiso de los colaboradores influye directamente en los resultados del proyecto. Pero la empresa debe implicarse de forma consciente para alimentar la motivación, la creatividad, el trabajo en equipo y la felicidad.