Tres ejemplos de la desigualdad de género en la empresa

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La igualdad de género de hecho y de derecho es un reto social importante que afecta a la empresa como protagonista de ese cambio. El poder de las metáforas tan utilizado en coaching también sirve para ejemplificar la desigualdad de oportunidades que todavía se produce en el ámbito de los negocios.

Techo de cristal

El techo de cristal es una metáfora visual, un símbolo expresivo para definir la situación que afecta al colectivo femenino que, a pesar de su preparación y formación, convive con constantes limites que condicionan su ascenso y progreso en el ámbito profesional. De este modo, a pesar de los logros alcanzados en el terreno de la igualdad, los límites son evidentes en el mapa laboral.

Diferencia de salarios

Existen distintos factores objetivos que sirven para visibilizar esta situación. Por ejemplo, la diferencia de salarios que afecta a algunos sectores. El propio sector del cine ha alzado su voz en la lucha por la igualdad.

La situación de desigualdad también es visible en tanto que todavía existen sectores que se consideran principalmente femeninos o masculinos. Por ejemplo, el talento femenino en la ciencia no tiene el mismo nivel de visibilidad. Por el contrario, muchos de los empleos considerados como típicamente femeninos son aquellos que posicionan a la mujer en un rol de cuidadora.

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El gran reto de la maternidad

Además, la maternidad es también una circunstancia que marca un punto de inflexión en la vida profesional de muchas mujeres trabajadoras que sienten cómo este cambio en su vida personal puede reducir sus posibilidades de crecimiento laboral.

Muchas mujeres sienten que tienen que renunciar a algunas de sus expectativas de trabajo ante la necesidad de priorizar su vida personal. Es decir, ese equilibrio de la conciliación es complejo porque algunas empresas todavía no se diferencian por ofrecer verdaderas políticas de igualdad.

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