Las empresas familiares afrontan el desafío de compartir la misión de un proyecto en común. Una entidad de estas características cuenta con factores que impulsan la resiliencia. Por ejemplo, los valores familiares. Sin embargo, los conflictos también hacen acto de presencia en este escenario corporativo. En Empresariados te damos cuatro consejos para solucionar las diferencias en empresas familiares.
1. Potenciar el diálogo
Es difícil solucionar un conflicto cuando cada uno conoce perfectamente su punto de vista pero presupone la realidad del otro. La palabra potencia el entendimiento al establecer puentes. De este modo, es posible superar una interpretación con la objetividad de los datos contrastados.
2. Negociación
El objetivo de esta negociación debe basarse en un acuerdo que ofrezca una ventaja para las partes implicadas en el asunto. Este horizonte queda descrito en el esquema win-win presentado por Stephen Covey en una obra que puede inspirarte: Los 7 hábitos de la gente altamente efectiva. Por tanto, pon de tu parte para crear las condiciones para un acuerdo de estas características.
3. Ayuda externa
Existen conflictos que llegan a prolongarse en el tiempo afectando, también, al vínculo afectivo. Quienes trabajan en una empresa familiar tienen la posibilidad de valorar distintos caminos de ayuda para solucionar retos pendientes. Una de las alternativas más efectivas es la mediación. En ese caso, un mediador acompaña a los protagonistas, desde una posición neutral, en este objetivo de lograr una solución.
4. Asertividad
La asertividad en el ámbito empresarial llega a aprenderse cuando existe el compromiso sincero de adquirir nuevas habilidades. La formación emocional tiene una importante aplicación en el trabajo.
Estos son algunos de los consejos que ofrecen recursos de apoyo en la solución de conflictos en empresas familiares.