Los locales comerciales ocupan un lugar importante en pueblos y ciudades. Locales que dan la bienvenida a negocios con futuro. El valor de este tipo de inmueble varía en función de diversos factores que comentamos a continuación en Empresariados.
1. Localización y evolución del barrio
La ubicación es uno de los datos más relevantes de un local que, desde esta dirección, tendrá una visibilidad ante los potenciales clientes. Existen calles que son más comerciales y este hecho eleva el valor de la propiedad. Pero también conviene tener en cuenta la evolución del entorno inmediato a esta localización. Aquellas mejoras que se lleven a cabo en el barrio influirán de forma significativa en el interés del local. También existe una diferencia entre aquellos locales que se encuentran a la atura de la calle y otros que están en otra planta más elevada de un edificio.
2. Relación entre la oferta y la demanda
Los emprendedores que quieren montar un negocio buscan el local ideal para poner en marcha el proyecto. Para ello, consultan distintos lugares antes de concretar una elección final. Conviene poner en relación dos variables en este contexto. La oferta, como hemos comentado, es un dato importante. Y, por otra parte, cuál es la demanda.
3. Características de la propiedad
Existen factores externos al propio inmueble que influyen de forma significativa en su valor. Pero también hay que considerar otros datos que describen el inmueble tal y como es. Cuanto mayor sea la superficie disponible, más elevado será también el precio del alquiler. Existen otros elementos a tener en cuenta. ¿Es un local nuevo o antiguo? ¿Ha experimentado una reforma reciente?
4. Precio de otros locales comerciales situados en ese barrio
Esta es una de las referencias que conviene considerar en este contexto. El precio del establecimiento mantendrá una proporción con el valor de otros locales cercanos.