Los clientes realizan una compra que pone el punto de atención en las características de un producto concreto. Pero dicha oferta también puede completarse con el valor añadido de otros datos que forman parte de la propia experiencia de compra.
1. Sostenibilidad
Los clientes no solo se fijan en el artículo en sí mismo, sino también en su proceso de elaboración. La utilización de materiales sostenibles es el reflejo de una toma de conciencia que cuida la naturaleza.
2. Historia de la empresa
El arte de contar y escuchar historias es inherente al ser humano desde la infancia. El storytelling es una de las fórmulas empleadas por las marcas para transmitir su esencia. En toda historia existe un inicio, un desarrollo y una evolución que adquiere una nueva vida a través de la palabra.
3. Valores de marca
Existen distintas empresas que buscan posicionarse en un mismo sector. ¿Cómo diferenciarse de la competencia en un escenario de estas características? Los valores de marca son una carta de presentación que describe la identidad del proyecto de moda.
4. Atención al cliente
Una de las razones determinantes por las que un consumidor decide volver a comprar en una tienda es el recuerdo positivo que guarda de una experiencia previa. El trato al cliente es la expresión de la bienvenida y el acompañamiento que necesita aquel que cuenta con un asesoramiento para hacer su compra. Para mejorar esta atención, es recomendable formar y motivar a los trabajadores.
5. Escaparate
La presentación del producto ofrece una primera impresión. Pues bien, en función del medio seleccionado, es recomendable potenciar la estética de dicho artículo, también, en la forma de presentarlo. El escaparate de una tienda situada en una calle céntrica llama la atención de quienes caminan por el lugar. Por su parte, la fotografía del producto presenta en detalle los matices de un diseño.