El sector de las librerías se reinventa constantemente. En este negocio, como en cualquier otro, también es posible la especialización. Existen cinco claros ejemplos de ello. Una librería infantil es aquella que da protagonismo a la venta de libros y de cuentos para niños. Además, estas librerías infantiles también promueven actividades culturales como los cuentacuentos y talleres de ocio.
Libros de segunda mano
Las librerías de segunda mano son una opción cada vez más demandada por parte de los clientes. Librerías que ponen a la venta por un precio muy económico libros de segunda mano pero que tienen una buena presentación y están bien cuidados. Este tipo de negocio también parte del valor de la cultura como un bien universal que debe estar al alcance de todos.
Libros antiguos
En el sector de las librerías también existen negocios que se especializan directamente en la venta de libros antiguos, obras que tienen historia y que son un legado cultural. El propio local transmite la esencia de lo antiguo como un valor atemporal. Los clientes de este tipo de librerías hacen inversiones en obras que quieren tener en su biblioteca personal.
Librería y cafetería
Cada vez son más los negocios que buscan el modo de integrar una librería con una zona de cafetería con el fin de poder facilitar que los lectores puedan tomar una infusión mientras leen sus libros favoritos. Dos negocios en uno que además, se complementan muy bien ya que un buen libro ofrece compañía durante las tardes de café.
Librería médica
Otra posible idea de negocio es la de montar una librería orientada al sector de la salud. Es lo que ocurre con las librerías médicas que presentan en su catálogo títulos de medicina. Los clientes habituales de este tipo de librería más técnica son profesionales y expertos en salud, además de estudiantes de medicina y farmacia.