Tener bienestar emocional en el trabajo, en más de una ocasión es un reto difícil de alcanzar. La mayoría de los trabajadores viven con cierta sensación de incertidumbre su futuro laboral marcado por el contexto de la crisis. Ante esta situación, el bienestar emocional debe estar impulsado más por uno mismo que por el entorno. El coaching se convierte en una de las mejores herramientas para trabajar la actitud individual con la que una persona se enfrenta a los hechos.
A la hora de disfrutar del trabajo en la oficina, más allá de las posibles amenazas adversas, intenta no tomarte nada como algo personal puesto que la mayoría de las decisiones que se toman, no tienen nada que ver contigo. Por ejemplo, un despido laboral no implica que el trabajador fuese poco eficiente, simplemente, la economía también manda en la empresa.
No reduzcas tu vida y tu valor al ámbito laboral, de lo contrario, la frustración y la decepción puede ser enorme en ciertos momentos. Intenta tener rutinas que te permitan conectar contigo mismo: por ejemplo, puedes apuntarte a clases de yoga, hacer ejercicios de relajación, ir paseando hasta la oficina…
No dejes las decisiones importantes para el último momento porque esta costumbre de postergar produce ansiedad y estrés en los trabajadores. Piensa en positivo, visualiza esas situaciones que de normal te angustian en tu rutina desde la calma. La visualización es uno de los mecanismos más utilizados para poder estar bien en la rutina y evitar los dramatismos que surgen del pesimismo.
Para tener bienestar en el trabajo también es adecuado acudir a un profesional a tiempo cuando la persona de verdad, necesita ayuda y apoyo. Ante una situación de depresión, lo ideal es acudir al psicólogo cuanto antes para poder iniciar un tratamiento. También puede ser adecuado participar en un curso sobre Inteligencia Emocional.