Cuando un trabajador inicia sus primeros pasos en el mundo laboral descubre que la formación entendida en su sentido académico no lo es todo. Existe otro aprendizaje básico en la empresa y en la vida. En Empresariados te damos las claves para aprender inteligencia emocional aplicada a tu vida cotidiana en la oficina.
Ser autodidacta
Tener una mente inquieta y curiosa es básico para aprender cosas nuevas. Desde el punto de vista de la inteligencia emocional, en la actualidad, existen muchos recursos para estar en contacto con información de este tipo. Puedes leer blogs sobre esta temática, consultar revistas de psicología, leer libros sobre inteligencia emocional… De hecho, puedes crear con tu grupo de amigos más cercanos, un taller de lectura en el que os podéis comprometer a leer un libro mensual para luego comentarlo en común. De esta forma, te enriqueces a través del feedback con el grupo.
También puedes participar en cursos emocionales, asistir a tertulias y seguir a profesionales que son un referente en el sector a través de las redes sociales.
Escucha los consejos de quien te quiere
A pesar de que cada persona tiene su camino a nivel profesional, existen muchas vivencias similares a nivel general. La mayoría de los trabajadores ha experimentado en su carrera momentos de ilusión que contrastan con etapas de desánimo. Por ello, aprende de la experiencia de aquellos que te quieren y te dan sus consejos porque desean lo mejor para ti.
La escuela de la experiencia
La experiencia es la mejor escuela para adquirir inteligencia emocional ya que es a través de una experiencia práctica cuando de verdad puedes extraer una lección de inteligencia emocional. En este sentido, recuerda que en los errores se esconde una gran oportunidad de aprendizaje. Por ejemplo, de los fallos que hayas tenido en el plano de la comunicación en la empresa, habrás aprendido lo que no se debe hacer.