Cuando una persona toma la decisión de elegir una idea de negocio puede encontrar una amplia variedad de propuestas ante las que enfocarse. Sin embargo, la idea es individual. ¿Cómo empezar a descartar opciones cuando la línea principal no la tienes identificada?
Aquello que no quieres hacer
Tal vez te resulte difícil identificar qué quieres, sin embargo, es muy probable que puedas empezar a descartar una amplia lluvia de propuestas al saber qué es lo que no quieres. La respuesta emocional que experimentas cuando una opción no te motiva es lo suficientemente clara como para escuchar este dato.
Cuando estás bloqueado puedes empezar a clarificar el propósito a través de un descarte que resulta sencillo de entrada. A veces, es más fácil saber qué es lo que no quieres cuando deseas descubrir cuál es tu verdadera motivación.
Asesoramiento
Cuando tienes dudas, también puedes contar con el asesoramiento de alguien que actúa como un mentor para ti. Desde su posición y experiencia de vida comparte contigo ideas, consejos y sugerencias que te sirven de apoyo en este momento. Puedes ver más allá de aquello que percibes ahora mismo al ampliar tu campo de información con una mirada externa a quien puedes plantear distintas preguntas.
Elección del nicho de mercado
Con cada decisión que tomas dentro del plan de acción orientado a concretar tu idea principal acotas el ámbito de actuación. Al elegir un nicho reduces la dimensión del mercado posible en torno a una temática muy específica y concreta.
Evalúa tus opciones preferidas
Si tienes dudas entre distintas ideas de negocio puedes reflexionar en torno a la viabilidad de cada día, la rentabilidad, su potencial de crecimiento, la competitividad y tu motivación interna. Concede una puntuación de un porcentaje de 0 a 5 para medir tus ideas preferidas y descartar otras posibles propuestas.