El currículum es tu carta de presentación y siempre existe un dilema habitual a la hora de redactarlo: ¿Qué poner exactamente y qué no poner en el folio? Existen datos prioritarios que no deben faltar. Por supuesto, los datos de tu identificación son una prioridad, para ello, puedes poner tu nombre y apellidos, el número de teléfono, la dirección de correo electrónico y tu blog personal. La edad y el estado civil no son datos fundamentales por lo que puedes prescindir de esta información.
En un currículum también es indispensable poner la formación por ello, no solo deben constar los estudios que tienes sino también, dónde has estudiado. Tiene más peso haber estudiado en una Universidad de prestigio que en otra que no tiene tanta proyección.
En un currículum deben constar las experiencias profesionales, dónde has trabajado y qué función has desempeñado. Sin embargo, si en una empresa has estado muy poco tiempo, puede ser más recomendable no poner este dato. En el currículum también debe de haber información en relación con los idiomas en caso de que domines el inglés u otra lengua. También es positivo añadir información sobre conocimientos de informática.
Para mejorar el currículum, recuerda que también es adecuado poner información referente a becas, estancias en el extranjero o premios especiales. Este tipo de méritos te hace destacar por encima de la competencia. Mejorar el currículum es básico, por tanto, nunca te estanques en el currículum que ya tienes hecho aunque te resulte muy cómodo tenerlo guardado en el ordenador y mandarlo en archivo adjunto a una empresa. Siempre hay que hacer cambios, actualizarlo y mejorarlo para tener éxito en la búsqueda de empleo. ¿Qué datos no pueden faltar en el currículum? Esos que te definen de una forma fundamental como trabajador, en general, los éxitos que has acumulado.