El plan de empresa es la herramienta principal que puede utilizar un emprendedor para darse cuenta si su proyecto es lo suficientemente sólido o es necesario hacer cambios. También permite analizar la posición actual de la empresa frente a sus competidores directos. El plan de empresa también es efectivo para definir el modelo de dirección y organización. ¿Cómo elaborar un buen plan de empresa?
Definir la esencia del proyecto
En el plan de empresa debe de quedar muy bien especificado para qué sirve ese producto o qué servicios se ofrecen en esa empresa. Toda empresa surge de ofrecer un servicio que satisface una necesidad: ¿Cuál es esa carencia? En el plan de empresa también se debe de detallar el equipo humano que forma parte de ese proyecto: número de personas, puestos que desempeñan, formación profesional y experiencia laboral.
El producto o servicio
En este apartado, es muy importante concretar cuáles son las características del producto o servicio. En el caso de tratarse de un producto, conviene detallar el proceso de fabricación hasta su elaboración final. En relación con el producto también es muy importante concretar el precio. También se debe de especificar el modo de distribución del producto.
A quién te diriges
En una empresa no solo es importante el producto sino también, el público objetivo. Por eso, para poder establecer un buen plan de marketing también tienes que saber a quién te diriges. Dependiendo del público objetivo es preferible optar por un canal de marketing u otro concreto. En el plan de empresa también se debe destinar un apartado a concretar la forma de hacer frente a la competencia.
Resumen ejecutivo
Este resumen es un cierre perfecto que contiene los rasgos principales del plan de empresa. La extensión recomendada para este apartado es de dos folios.