La decisión de empezar a escribir un blog debe ser meditada, sobre todo, si el objetivo es utilizarlo con fines profesionales o para difundir actividades o productos de la empresa. Un motivo por el que es conveniente pararse a pensar una serie de aspectos para no cometer errores y que el blog sea efectivo.
Y es que muchas veces la decisión se toma de forma precipitada, lo que dificulta que se pueda utilizar esta herramienta, que es una de las más populares para hacerse una marca o nombre en Internet. Algunos de estos aspectos son meramente técnicos.
Las primeras decisiones
Uno de los primeros elementos en los que hay que pensar es si se emplea una plataforma online, que es más indicada si no se tienen muchos conocimientos previos, o bien si el blog se instala en un gestor de contenidos.
En este sentido, hay que tener presente que la opción de utilizar un gestor de contenidos es adecuada para todos aquellos que quieran tener un control total sobre el blog y personalizarlo. Además, en este caso, es preciso también tener conocimientos previos y contratar un espacio de posting en un proveedor y comprar un nombre de dominio.
No obstante, este sistema, a pesar de ser más costoso, presenta algunas ventajas como la posibilidad de eliminar los comentarios de spam y optimizar el posicionamiento en buscadores SEO, entre otros.
Igualmente es conveniente decidir si se emplea un dominio propio o un subdominio o direcciones que otorgan las plataformas.
Y otra decisión a adoptar es si se debe personalizar el blog. Es una opción interesante puesto que permite establecer una diferencia en relación a otros blogs y las plantillas que se ofrecen a través de las diferentes plataformas.
No hay que olvidar que el diseño es importante y que ayuda a que el blog sea atractivo. Además, hay que tener presente el tipo de contenido que se le va a dar para elegir bien su estructura, fotos o la tipografía, entre otros elementos.