El comité de empresa está integrado por personas que cumplen una función esencial: representar a los profesionales de la entidad y defender sus derechos. En definitiva, es un órgano que ocupa una posición relevante en una organización como medio para proteger los intereses del equipo. Por ello, el comité interviene en diferentes procesos: los profesionales destacan por sus habilidades de negociación, comunicación y mediación. Como hemos señalado, las personas que forman parte del comité de empresa realizan una labor de representación. Pues bien, hay que aclarar que el proceso de elección es totalmente democrático, libre y transparente.
La labor realizada también aporta algunas ventajas como, por ejemplo, disponer de tiempo para el cumplimiento de tareas, gestiones y funciones que se enmarcan en este contexto. Los representantes de los trabajadores deben conocer muy bien la entidad en la que participan y reciben información actualizada sobre la situación en la que se encuentra. El conocimiento es clave para tener la capacidad de negociar a partir de un escenario determinado que siempre es particular y concreto.
Cuándo se constituye el comité de empresa
Conviene indicar que no todas las entidades cuentan con este órgano, puesto que su constitución no es obligatoria de forma general desde el punto de vista legal. Sí desempeña un papel esencial en empresas que reúnen a más de 1.000 trabajadores en la plantilla. Sin embargo, hay empresas más pequeñas que también cuentan con un comité porque es un derecho de los trabajadores (que pueden participar de forma activa en la organización). El número de miembros varía en función del tamaño de la entidad. Como hemos mencionado, defienden los derechos de todos los empleados en su conjunto.
Su voz puede ser clave para garantizar el cumplimiento de principios específicos o mejorar las condiciones de trabajo en relación con la seguridad o la conciliación. En consecuencia, el comité participa de forma activa en procesos colectivos que se producen en este ámbito. Hay diferentes procesos que generan un cambio en el proyecto como, por ejemplo, una posible reestructuración en la plantilla.
Ventajas y obligaciones de los miembros del comité de empresa
Las personas que participan en el comité de empresa realizan su labor con libertad y expresan sus aportaciones con sinceridad. Durante el tiempo en el que un perfil profesional está inmerso en esta labor de representación no puede ser despedido (o es poco probable que se propicie esa circunstancia desde el punto de vista legal).
Las posibles ventajas que se derivan del puesto, en realidad, crean el contexto favorable para llevar a cabo la tarea principal y el cumplimiento de las obligaciones que se derivan del cargo con responsabilidad, coherencia y compromiso. Los representantes mantienen una comunicación directa con la empresa y también con aquellos profesionales a los que representan tras haber sido elegidos de manera democrática (transmiten información de valor y datos actualizados en torno a temas de interés para el grupo en su conjunto).
El comité de empresa y su papel como mediador
El comité de empresa es, en esencia, un interlocutor. Como hemos comentado, establece una comunicación directa con la entidad y con los trabajadores. De este modo, realiza una labor de mediación cuando surgen conflictos entre ambas partes y se implica para alcanzar una solución. El comité está integrado por diferentes roles y perfiles.
El comité adopta una posición proactiva más allá del alcance del conflicto en sí mismo, es decir, actúa para que se cumpla la normativa correspondiente incluso cuando una circunstancia concreta afecta a un reducido número de empleados. El papel del presidente es clave puesto que adopta esta posición en las reuniones y supervisa la correcta evolución de los procesos.