El emprendimiento también puede alinearse con una circunstancia personal: el rol profesional y la paternidad o la maternidad, en ocasiones, forman un binomio difícil de conciliar. Y el autocuidado se presenta como ese requisito esencial para potenciar el bienestar emocional, la gestión del negocio y la atención de las responsabilidades familiares. En Empresariados proponemos siete consejos de autocuidado para padres y madres emprendedores.
1. Concéntrate en la esfera de la vida en la que te encuentras
Uno de los principales obstáculos que interfiere en el bienestar de padres y madres emprendedores es el siguiente. La atención no siempre se alinea con el objetivo inmediato. Así ocurre cuando una persona que se encuentra en su horario laboral está pendiente de otros asuntos relacionados con la rutina de sus hijos. La atención dispersa debilita la energía.
2. Diálogo interior positivo: no alimentes la culpabilidad
En el interior de padres y madres emprendedores se produce una lucha interior en numerosas ocasiones. Surge el peso de la culpa. Y la persona escucha una voz interna que le lleva a creer que no hace lo correcto en algún aspecto. No alimentes la culpabilidad a través de la rumiación mental, el pesimismo o el exceso de autoexigencia. Por el contrario, cultiva un diálogo interior positivo: siempre intentas ser tu mejor versión en el ámbito profesional y personal. Es decir, haces todo lo que puedes.
3. Pon en valor el emprendimiento: es un bien para ti y tu familia
En ocasiones, puede que cuando hagas balance de aquello que te quita el emprendimiento, llegues a la conclusión de que no te permite estar con tus hijos tanto tiempo como te gustaría. A lo mejor realizas viajes de negocios que te alejan de tu domicilio durante varios días a lo largo del año. Sin embargo, si te has comprometido con un proyecto, pon en valor todo lo que suma a tu vida: representa un bien para ti y tu familia. Ten en cuenta que el esfuerzo, la constancia, la exigencia y las horas de trabajo proporcionan una fuente de estabilidad económica que es esencial para materializar un proyecto de vida a largo plazo.
4. Vacaciones, aunque sean breves
Padres y madres emprendedores tienen dificultades para desconectar de sus compromisos profesionales. Sin embargo, las vacaciones forman parte del autocuidado personal (aunque el periodo de descanso sea breve). Los días libres, aquellos que se desarrollan en un entorno distinto a la oficina, te permiten concentrarte plenamente en tu vida familiar. Es decir, te aportan el marco ideal para organizar planes con tus hijos y tus amigos.
5. Aplica diferentes herramientas de organización y planificación
A veces, padres y madres emprendedores se sienten desbordados por imprevistos frecuentes en la vida familiar o en el negocio. No es fácil responder de forma proactiva cuando se produce un hecho inesperado. Aplica diferentes herramientas de organización y planificación para anticiparte a los objetivos y necesidades de la próxima semana, por ejemplo.
6. Camina y pasea cada día
Los hábitos más sencillos son especialmente eficaces porque resultan realistas y alcanzables. Caminar y pasear cada día es un ejemplo de ello. Una acción que requiere del compromiso personal y de la constancia necesaria para completar un itinerario próximo a casa o la dirección en la que se ubica el lugar de trabajo. Caminar es una acción que alimenta el autocuidado porque fomenta el bienestar físico y emocional.
7. Delega en tu vida profesional y personal
Los síntomas de estrés pueden hacer visible el peso de la responsabilidad con el que cargan padres y madres emprendedores en el ámbito profesional, personal y familiar. Delegar, aunque sea en pequeñas dosis, es un gesto de sabiduría que repercute en tu autocuidado.