Muchos emprendedores deciden apostar por el emprendimiento online porque además de ofrecer buenas opciones de desarrollo requiere un nivel de inversión bajo. Uno de los pasos más importantes para incrementar la rentabilidad en estos negocios, convirtiendo las visitas en compras, es definir del modo más preciso posible el perfil del cliente objetivo: ¿Cuáles son sus necesidades? ¿Qué soluciones puedes ofrecer? ¿Qué busca en tu tienda? Un negocio online es un sitio web que atrae un tráfico de visitas que son potenciales compradores y este proceso es uno de los más difíciles. Analiza todas las posibilidades que ofrece tu producto.
Crear comunidad
Los negocios online no cuentan con el trato personal cara a cara que sí es posible en un negocio tradicional. Sin embargo, sí ofrecen la posibilidad de crear un entorno de comunidad a través de las redes sociales. O también, a través de la suscripción a la newsletter. Utiliza las redes sociales que mejor se ajusten a tu tipo de negocio.
Seguimiento del pedido
Si tu tienda online cuenta con un sello de calidad que acredita una garantía de confianza, esto también ofrece una mayor garantía a aquellos clientes que son más escépticos al hacer sus compras online. Otro de los servicios que también mejora la confianza de los clientes es que puedan estar informados del estado del pedido que han realizado pudiendo hacer un seguimiento personalizado.
Actualización periódica del blog
Muchas tiendas online cometen el error de no dar el protagonismo que merece al blog, quedando sin actualizar durante semanas o meses. Esto produce una imagen de caducidad. Por el contrario, establecer un calendario de publicaciones con fechas semanales es muy aconsejable para ofrecer contenidos de calidad a los clientes pero también, para un mejor posicionarmiento de la tienda online. Al final de los contenidos de tu post, pide abiertamente a tus lectores que compartan la información en sus redes sociales si el contenido ha sido de su interés.