No todas las competencias de trabajo aparecen claramente reflejadas en el currículum profesional que resume la formación teórica y experiencia práctica de un candidato. Por esta razón, los procesos de selección que permiten conocer mejor a los profesionales, son tan importantes. Una de las competencias profesionales más valoradas en el ámbito de la empresa es la capacidad de trabajar en equipo. Tener esta disposición simplifica las dificultades que de por sí pueden producirse cuando se trabaja en grupo. El perfil de profesionales que tienen un rol más individualista, no se ajusta a esta competencia.
Gestión del tiempo y cumplimiento de los plazos
Otra de las competencias más importantes que las empresas buscan en los trabajadores es que los empleados sean capaces de optimizar la gestión del tiempo asumiendo la responsabilidad de cumplir los plazos de entrega de un proyecto en el periodo de tiempo establecido.
Autonomía personal
Los empleados de la empresa tienen un jefe. Pero eso no significa que los jefes no valoren la autonomía personal de sus trabajadores para que desarrollen su trabajo de una forma lo más independiente posible. Esta capacidad es importante para aprender a delegar con confianza en profesionales responsables.
Conocimientos tecnológicos
Las empresas evolucionan de una forma permanente, por esta razón, los profesionales también deben adaptarse a esta rutina de trabajo con las competencias técnicas necesarias, mostrando un conocimiento actualizado en este ámbito. Cada empresa tiene sus propias pautas en este sentido y puede establecer el uso de un programa de ordenador concreto cuyas funciones debe conocer el candidato.
Sentido positivo de la ambición
Tener una actitud de superación personal para llegar a ser la mejor versión de uno mismo mejora la marca personal ante la empresa. Y la marca de los trabajadores también influye en la imagen corporativa del propio negocio.