El arte de contar historias ha acompañado al ser humano a lo largo de la historia. Y esta capacidad de sorprender con un relato emocional también se contextualiza en el marco corporativo de la gestión de un negocio. Esta es la esencia del storytelling. ¿Cuáles son los beneficios que aporta en la empresa?
1. Identidad de empresa
A través de esta historia es posible diferenciar el proyecto e individualizarlo al poner de manifiesto cuál es su identidad. Es decir, al expresar cuál es la misión, valores, visión y filosofía de la entidad. Esta historia añade valor al propio logo que es el distintivo visual del negocio.
2. Marketing
Una empresa invierte en acciones de marketing para posicionar sus productos y servicios en el mercado. Pero el marketing también es el resultado natural del trabajo bien hecho. Una consecuencia de una historia es que otras personas también la compartan en su entorno más cercano. Por ello, otros clientes del negocio también contribuyen a la promoción de la entidad cuando visibilizan la historia del negocio en sus redes sociales o entorno presencial.
3. Inteligencia emocional
En el relato de una buena historia existe un ingrediente que no debe faltar: la emoción. De este modo, el interlocutor de esa historia siente curiosidad, alegría, nostalgia o aquello que el propio emisor ha deseado transmitir en esta interacción. La inteligencia emocional forma parte de la realidad de un negocio desde distintos puntos de vista. Uno de ellos, el storytelling.
4. Confianza
Mediante una historia que expresa la identidad corporativa como una manifestación de la autenticidad de ese proyecto, el cliente lo observa con más confianza. La empresa se comunica de manera frecuente con el público objetivo a través de diferentes fórmulas. Una de ellas, esta capacidad de contar bonitas historias.
El storytelling aporta, por tanto, marketing, identidad, inteligencia emocional y confianza.