Estamos en un mundo cada vez más digitalizado y son muchas las actividades que en las últimas décadas han migrado al entorno digital. Ha cambiado nuestra manera de consumir películas y música, de relacionarnos con nuestros seres queridos vía redes sociales o incluso se ha revolucionado nuestra manera de trabajar, en alguna ocasión íntegramente desde el hogar. La formación también se ha visto claramente condicionada por las pantallas, y cada vez es más común encontrar cursos en la red y todo tipo de conocimiento.
Una de las grandes ventajas que ofrece esta opción es el aprovechamiento del tiempo. Muchos de estos contenidos son atemporales y se pueden consumir cuando el usuario tenga disponibilidad. La flexibilidad es uno de los puntos más valorados por este tipo de estudiantes. Además, no se reclama una presencialidad y, el hecho de solamente necesitar un dispositivo y conexión a la red hace que la oferta se amplíe y se pueda aprovechar aquella procedente de otros países.
Los más demandados
Hay cursos de todos los tipos y numerosas academias digitales especializadas como Coursera o UniMOOC. Uno de los campos más demandados es el del marketing online y todo lo que comporta. Aquí entran temas concretos como la gestión de redes sociales, cómo impulsar de cero un negocio digital, el análisis de tráfico web, la redacción publicitaria o todo aquello relacionado con la optimización de los buscadores. Muchas empresas tienen como objetivo potenciar su imagen digital, más importante que nunca en los últimos años, y tratar de ayudarlas siempre puede ser una salida laboral.
En la misma línea, hay otras tareas específicas relacionadas con las computadoras que despiertan mucho interés entre el público, sobre todo entre aquellos que quieren crecer profesionalmente. El diseño gráfico siempre ha sido uno de los estudios más reclamados en la modalidad telemática, y cada vez es más común encontrar cursos de especialización como los que ahondan en programas como Microsoft Excel o en la propia programación, haciendo hincapié en el desarrollo de páginas web o de aplicaciones para IOS y Android.
Cabe destacar otras formaciones que, aparte de poder convertirse en una posible salida laboral, ayudan al usuario en su crecimiento personal. Son típicas prácticas introductorias o de mejora en la fotografía o los idiomas, campos que son atractivos para muchos públicos, o la ampliación de conocimientos para mejorar las rutinas nutricionales o psicológicas para mantener un estado de salud óptimo. Formarse en frente de la pantalla para después disfrutarlas alejadas de ellas.
Los cursos online han llegado incluso a cubrir actividades de entretenimiento, dando consejos para que los usuarios mejoren y disfruten más de la experiencia. Hay numerosos ejemplos de ello y podemos destacar la academia de PokerStars que propone diversos consejos y herramientas de esta disciplina, la plataforma Chess24 con el abanico de estrategias disponibles para superar al rival en una partida de ajedrez o el centro e-Squad, especializado en varios deportes electrónicos, como los populares League of Legends, FIFA o Fortnite.
Tipo de formación online
En este artículo hemos hablado de las ventajas y de la amplia oferta de estos cursos, pero la formación online no se enmarca solamente en este tipo de contenidos. Ya hace muchos años que se pueden encontrar en plataformas de vídeo como YouTube tutoriales muy útiles para la resolución de problemas concretos. Una evolución superior sería los webinars o seminarios web, presentes en muchos cursos, que son encuentros o conferencias hechas por expertos mediante videoconferencia que especialmente se pueden encontrar en el mundo comercial, empresarial y educativo.
Pero la formación se ha ido expandiendo por la red de la mano de las nuevas tecnologías. Los cursos ya no son el nivel más elevado de transmisión de conocimientos que podemos encontrar. Hay centros universitarios que han trasladado parte de sus licenciaturas, másteres, posgrados e incluso doctorados al campo digital, y hay algunas de estas instituciones que han nacido expresamente para cubrir esas necesidades formativas en el mundo virtual. Ahora es posible ir a la universidad y seguir formándose con un solo clic. Adiós a las excusas.