En un contexto globalizado marcado por el marketing de internet que aporta una visión global a los negocios, conviene puntualizar que muchas empresas también necesitan enfocarse desde una perspectiva local. Por ejemplo, tiendas de ropa, bares, restaurantes y negocios pequeños ubicados en una localización específica.
Esta localización que conecta con el entorno próximo, es el principal marco de actuación para atraer clientes al negocio. Mientras que el marketing digital ayuda a un negocio a posicionarse en el escaparate de internet gracias al posicionamiento SEO, el marketing local es aquel que está orientado a que un comercio marque el valor diferencial respecto de la competencia en su propia zona.
Cómo practicar el marketing local
Es recomendable reforzar el asociacionismo al formar parte de asociaciones de comerciantes que llevan a cabo iniciativas para dinamizar la vida comercial del barrio. Además, el local adquiere un significado añadido en relación con su imagen visual, comodidad en la experiencia de compra o presentación de los productos. Por tanto, el cuidado del local ayuda a afianzar la imagen corporativa.
Señalización
Son muchas las personas que pueden pasar por esa zona, sin embargo, son tantos los comercios situados en una ubicación cercana que es importante que el negocio esté definido por una óptima señalización que ofrece esa visibilidad ante los clientes.
Marketing local online
Por supuesto, esta forma de promoción también se nutre de los beneficios de las nuevas tecnologías. En este caso, la inversión reside en posicionamiento localizado en una zona específica a partir del uso de palabras clave. Para facilitar la ubicación del negocio, puedes tener presencia en Google Maps.
A través de este tipo de marketing, el negocio debe identificar el producto o servicio que ofrece, contextualizado a un ámbito local. De este modo, aquellas empresas que buscan un servicio específico en ese lugar, pueden localizarlo.