Tres consejos para convertir las emociones negativas en creatividad


El entorno laboral es en donde más emociones negativas, se producen. El estrés, la ansiedad, la impaciencia, la presión, el enfado, la frustración son más habituales de lo que parece a simple vista. La situación general de un equipo se agrava cuando son varias las personas que tienen estos sentimientos. ¿Cómo convertir las emociones negativas en creatividad?

En primer lugar, cambia el chip: aprende a relativizar, no te tomes todo tan en serio, pon cada cosa en su lugar, no dejes de lado el sentido del humor… Relájate y disfruta porque así podrás sacar toda tu creatividad. Las emociones desagradables te generan tal tensión y negatividad que es imposible trabajar de una forma constructiva.

Por otra parte, habla de lo que sientes, comparte tus miedos y tus inquietudes. Son muchas las personas que se guardan todo lo que les afecta en el entorno laboral. Sin embargo, merece la pena aprender a compartir. Por supuesto, tienes que ser prudente y no hablar de algo que para ti es importante con cualquier compañero. Pero en una empresa, es posible encontrar al menos, una persona con la que conectar de verdad.

Toma conciencia de cuáles son tus emociones y de qué haces con ellas. En muchos casos, las emociones desagradables se reprimen y se ocultan. Esto no es nunca una buena idea. Por ello, empieza a buscar otra vía de escape para poder liberar tensiones. Por ejemplo, puedes hacer deporte y ejercicio físico con regularidad. Cuerpo y mente están más conectados de lo que parece a simple vista. Para finalizar, estate muy atento ante las señales de alarma que a veces, se producen a nivel físico. Alguien puede sufrir sensación de opresión en el pecho después de una temporada de mucha ansiedad. Así sucede ante un ataque de pánico.

Deja una respuesta