Existen muchos cambios que pueden llevarse a cabo en una empresa. La comunicación es ese factor que está presente en todos los ámbitos de la entidad. Por ello, aquellas mejoras que se enmarcan en este plano, producen una huella significativa a largo plazo. La utilización del lenguaje inclusivo puede marcar la diferencia en un proyecto que está integrado por varias personas. En Empresariados compartimos cinco razones para utilizar un lenguaje inclusivo:
1. Generar un verdadero sentimiento de pertenencia
El lenguaje inclusivo muestra el nivel de importancia que poseen las palabras y la diferencia que existe en los matices. Pone en valor el uso de conceptos y expresiones que promueven la igualdad. De este modo, cualquier persona se siente integrada en dicha interacción.
En definitiva, cuando las palabras se utilizan de forma consciente en este contexto, alimentan el salario emocional y el bienestar. El lenguaje inclusivo no solo refuerza las bases de un agradable clima de trabajo. También crea puentes de entendimiento en la resolución de conflictos.
2. Adoptar un liderazgo inclusivo en la empresa
El liderazgo tiene enfoques diferentes en la práctica. De hecho, cada líder puede inspirarse en otros modelos que actúan como una referencia. Pues bien, existe una propuesta que destaca por su compromiso con el humanismo, la igualdad de oportunidades y la transformación social: un liderazgo inclusivo refuerza la innovación en el ámbito de los recursos humanos.
Eleva la imagen corporativa ante los clientes y empleados. De hecho, fortalece la comunicación interna. El liderazgo inclusivo pone en el centro de su estrategia a la persona.
3. Potenciar la igualdad de oportunidades en la gestión del talento
La misión de una empresa responsable va más allá de la búsqueda de resultados valiosos que se materializan a través del beneficio y la rentabilidad. La huella de una entidad trasciende más allá del ámbito económico. Por ejemplo, puede mostrar su responsabilidad y su compromiso con el entorno por medio de iniciativas que se alinean con la igualdad de oportunidades en la gestión del talento.
Pues bien, los cambios adoptados en el plano del lenguaje pueden generar una notable transformación. Así ocurre cuando alimentan la reflexión consciente y la sensibilización en torno a un objetivo social.
4. Innovación en el marketing digital
El lenguaje ofrece numerosos recursos para potenciar la innovación y la creatividad en una entidad. La búsqueda de la diferenciación también se refleja en el marketing. Una misma idea puede expresarse de maneras diferentes. ¿Pero cómo seleccionar la fórmula que conecta con el público objetivo? Cada vez más empresas potencian el lenguaje inclusivo en su comunicación interna y externa.
De este modo, elevan la conexión con el grupo y se evita cualquier forma de discriminación. La medida también aporta una nueva perspectiva para superar prejuicios y estereotipos.
5. Transmitir una imagen actual de la empresa ante clientes y trabajadores
Los negocios que tienen una larga historia adoptan diferentes medidas para evolucionar. Por ejemplo, el relevo generacional es frecuente en entidades que tienen un componente familiar. Por otra parte, la transformación digital evita el estancamiento de un proyecto en un punto determinado. El emprendimiento se renueva cada día con aquellas acciones que se desarrollan en presente.
Pues bien, el lenguaje inclusivo es muy valorado actualmente. Es un enfoque que puede materializarse en los contenidos publicados en redes sociales, en la comunicación interna o externa, en los planes de formación desarrollados a nivel corporativo y en el marketing.
Por tanto, la integración de un lenguaje inclusivo en la empresa no es fruto de la improvisación. Existe una estrategia y una planificación. Es un enfoque que genera un impacto relevante en la entidad y en la sociedad.