Muchos emprendedores invierten en la compra de un local comercial cuyo precio aumenta dependiendo de la ubicación, el estado de la reforma y la superficie disponible para el trabajo. Si estás en este proceso, es muy positivo que tomes la iniciativa de negociar a la baja un precio. La posibilidad de hacerlo depende, en gran medida, del tiempo que lleva ese local puesto en venta puesto que generalmente, cuanto más tiempo haya pasado, más interés tendrá el dueño en venderlo.
Igualmente positivo es que te informes sobre cuál es la motivación que ha llevado al dueño a tomar esta decisión ya que dependiendo de las razones, tendrás más opciones para negociar.
Aspectos a tener en cuenta
Pero existe un criterio que es básico para poder negociar con realismo. Define cuál es tu presupuesto máximo para emprender. Esta cantidad te servirá de referencia constante para decidir cuánto estás dispuesto a invertir.
Pero además, al valorar el precio real de un local no solo puedes observar las condiciones de la estancia, sino también, otros servicios añadidos. Por ejemplo, si está o no bien comunicado, puesto que las vías de acceso son muy importantes para los clientes.
Igualmente, si en esa zona está previsto algún plan de urbanización que va a revitalizar el barrio con alguna iniciativa importante, este elemento suma puntos a ese local. Además, al valorar el estado general del local también es muy importante que observes especialmente si el espacio muestra algún tipo de humedades. O cuál es la situación del tejado.
Tener más de un inmueble en perspectiva
Si hay más de un inmueble que te ha gustado, entonces, esto también es una ventaja para negociar el precio a la baja ya que tienes más de una opción. Pero además, también puedes compartir tu idea de negocio con el dueño del local. Muchas personas valoran esta información porque aporta un valor añadido al futuro del propio espacio.