El refuerzo y la motivación son dos de los ingredientes más importantes durante el trabajo en equipo. El objetivo de motivar no termina en un momento determinado, no llega a su fin con el cumplimiento de un éxito compartido. Esta es una experiencia que se describe en un proceso continuo. En Empresariados te damos cuatro consejos para motivar al equipo de trabajo.
1. Formación
El aprendizaje incrementa la motivación porque permite que los protagonistas tengan la oportunidad de trasladar las ideas y habilidades aprendidas al contexto práctico del trabajo en la empresa. Este estímulo de conocimiento, además, también rompe con la rutina de la zona de confort.
2. Objetivos de conciliación en la empresa
Todos los miembros del equipo de trabajo, al margen de cuáles sean sus circunstancias personales, valoran el hecho de poder conciliar su dedicación al trabajo con el disfrute de su tiempo libre. Existen distintas fórmulas que favorecen la conciliación. Por ejemplo, la flexibilidad de trabajar desde casa durante un día o dos por semana.
3. Mediación ante el conflicto
En un equipo de trabajo también surgen diferencias de criterio y dificultades que si no se gestionan llegan a entorpecer la comunicación de los protagonistas. El líder realiza una labor de mediación cuando surgen estas diferencias y, además, también potencia en el equipo la importancia del “nosotros”, más allá de la búsqueda del reconocimiento individual. Pero, al mismo tiempo, transmite confianza a los colaboradores para que resuelvan sus diferencias con iniciativa.
4. Conoce al equipo
Para motivar verdaderamente al equipo, en primer lugar, tienes que conocer a las personas que trabajan contigo. Para conocer a un equipo también es recomendable diseñar acciones corporativas para retener el talento. De lo contrario, si los cambios en la plantilla son constantes, el equipo experimenta un continuo proceso de adaptación a la novedad de una nueva incorporación.