El teletrabajo es gratificante para los profesionales, sin embargo, también lo es para las empresas. Uno de los más importantes es la reducción de los costes en la infraestructura necesaria y el equipamiento de las instalaciones puesto que el trabajador establece su oficina en casa. Esta forma de trabajo también puede suponer un aumento de la productividad porque los profesionales que trabajan en casa son más felices al sentir que tienen mayor libertad. Por otra parte, el teletrabajo también ofrece otra ventaja añadida a la empresa: reducción de los conflictos personales que son uno de los principales motivos de desgaste en un equipo.
Se reduce el absentismo laboral
Por otra parte, se reduce el absentismo laboral además de incrementar la tranquilidad en los trabajadores que sienten que pueden hacer frente de un modo más eficaz a posibles imprevistos que surgen de la conciliación laboral. A través de la modalidad del teletrabajo lo que realmente importa es el plazo de finalización de un proyecto. Pero dentro de ese periodo de tiempo establecido, el profesional tiene disposición de tiempo para desarrollarlo de acuerdo a su propia agenda.
Al poder ofrecer un empleo de mejor calidad a través de las condiciones que ofrece el teletrabajo también se incrementan las posibilidades de retener el talento en la empresa. Además, esta forma de trabajo permite contratar a profesionales con mayor margen geográfico. Aumentan las posibilidades de contratar profesionales cualificados que se ajustan al perfil del puesto.
Aumento del nivel de implicación de los trabajadores
Otro aspecto muy importante es el cuidado de la salud de los trabajadores ya que gracias al teletrabajo también se reducen los niveles de estrés y ansiedad en la oficina. El teletrabajo incrementa el nivel de implicación de los trabajadores en los objetivos de empresa. Si por alguna razón, el trabajador debe realizar horas extra para sacar adelante un proyecto, se sentirá más motivado para ello si puede hacer su tarea en casa.