La claridad es la cualidad más importante de un buen currículum. Los seleccioadores de recursos humanos de las empresas reciben cada día tantos currículums de diferentes candidatos que conviene apostar por la claridad recordando que para cualquier trabajador, su tiempo vale oro. Un currículum claro, breve y conciso es aquel que detalle lo esencial y que puede ser entendido en un solo golpe de vista. ¿Cómo dar más claridad a los datos de tu currículum?
Simplifica tu trayectoria
Es natural haber hecho muchos cursos a lo largo de los años, sin embargo, tienes que establecer un orden de prioridades, ser selectivo y acotar el máximo posible tu currículum poniendo los datos que de verdad son esenciales para ti y que te definen de una forma positiva.
Evita los juicios de valor y las frases hechas
Tú eres el protagonista de tu currículum, por esta razón, tienes que esforzarte mucho por mantener la objetividad total en la descripción de los datos. Evita las frases hechas o resultar un vanidoso al hacer ciertos comentarios.
Datos de contacto
Existen personas que en el currículum llegan a poner incluso la dirección de su casa. Recuerda que solo tienes que poner tu teléfono móvil, tu dirección de correo electrónico y tu nombre y apellidos. No es necesario poner el estado civil. Poner la edad es una opción personal.
Experiencia profesional
El currículum no es como una biografía que empmieza en un año y va a avanzando a partir de ese momento. En realidad es importante que el currículum esté actual y esté vivo. Por esta razón, para captar la atención del seleccionador de recursos humanos, comienza siempre describiendo la última experiencia profesional que has tenido en una empresa. Detalla qué hacías en ese puesto. Para valorar qué efecto visual produce tu currículum puedes pedir opinión a amigos y familiares.