Existen muchos perfiles posibles en el contexto laboral puesto que, como en la vida, una empresa está formada por personas y cada una de ellas es única y diferente. Existen muchos tipos de perfiles diferentes pero en este artículo me gustaría hablar de cinco frecuentes, y todos ellos, describen a profesionales con cualidades valiosas.
El métodico y organizado
Algunos trabajadores destacan por tener un sentido de la autodisciplina prácticamente, innato. Son personas metódicas que llevan un estricto orden de sus tareas sin que les cueste un esfuerzo aparente. De hecho, lo que saca de contexto a este tipo de trabajador es el imprevisto que rompe con el horario del día.
El carismático
En todas las empresas existen algunos trabajadores que destacan por su liderazgo ante los demás, personas que sin proponérselo se convierten en un referente social. El líder ejerce una gran labor al unir al grupo.
El disponible
Es aquel profesional que muestra una actitud de disposición de ayuda constante hacia la empresa, cuando se requiere su colaboración en un nuevo proyecto siempre muestra su mejor actitud.
El competitivo
Un trabajador competitivo es aquel que trabaja duro por alcanzar nuevos objetivos de empresa puesto que el reto de la superación es inherente a su propio modo de ser.
El inteligente emocional
Se habla mucho sobre el trabajador tóxico pero no se comenta tanto el perfil del inteligente emocional. Y generalmente, en todas las empresas, existe una persona que destaca por sus habiliaddes de empatía, su don para las relaciones sociales, su capacidad de escucha activa y su rol como mediadora. Su presencia es agradable ya que con sus actitudes proyecta un ejemplo positivo para los demás.
El polifacético
El polifacético es aquella persona que realiza distintas tareas, es un profesional resolutivo, abarca mucho durante su tiempo de trabajo y además, afronta el reto de la formación constante.