El cloud está llamado a ser la tecnología no ya del futuro, sino de un presente bastante inmediato. Un motivo por el que se siguen lanzando nuevas aplicaciones y funcionalidades, además de investigar para que se hagan realidad nuevos desarrollos. Y este es el caso de Telefónica Digital e Intel que acaban de culminar de forma exitosa la primera fase de un proyecto piloto conjunto para ofrecer servicios de cloud híbrido a través de los que las empresas tendrán la posibilidad de aumentar su capacidad de almacenaje.
Esta iniciativa, que se ha desarrollado utilizando el Cloud Builder privado de Intel y el Cloud Público de Telefónica a través de Virtual Data Center –su centro virtual de datos-, facilitará que las empresas dispongan de más capacidad de almacenaje, además de permitir que se puedan mover fácilmente tantas aplicaciones como se desee o bien incrementar la capacidad de estas aplicaciones entre el centro de datos interno y otro externo o cloud público.
La ventaja de esta iniciativa es que además se pueden mantener las aplicaciones o una parte de ellas funcionando en el servidor interno y mover las que la empresa crea conveniente hacia el cloud externo sin que se produzca ninguna incompatibilidad como consecuencia de la portabilidad o interoperabilidad entre los dos entornos.
Con este sistema desarrollado por ambas compañías, el cloud externo tendrá también capacidad para proporcionar un portal integrado en el que las empresas puedan gestionar la información de sus centros de datos internos y los recursos que estén desplegados en el cloud público.
Tras esta primera fase del proyecto, ahora ambas compañías afrontan una segunda fase en la que se emplearán las tecnologías Intel Trusted Execution, Intel Node Manager e Intel Data Center Manager. El objetivo, en esta ocasión, es conseguir demostrar la fiabilidad de las políticas de gestión de infraestructuras entre diferentes sistemas cloud.